Raquel Carrera, una joven que demuestra estar destinada a la grandeza
Con solo 19 años el nombre de Raquel Carrera ha retumbado por todas las esquinas de Europa, llegando el eco hasta los Estados Unidos donde también han puesto los ojos sobre ella.
La joven interior del Valencia Basket tiene un potencial increíble, y el conjunto taronja lo vio claro desde el primer momento. La firmaron en el 2019 con un contrato de varias temporadas, asegurándose tener una piedra angular de su proyecto durante un lustro como mínimo.
Desde su etapa en el Celta ya daba una gran impresión, y luego tuvo una prueba de fuego en Araski AES estando ya bajo el ala del equipo valenciano pero cedida. Tras seguirse desarrollando con el club vasco llegó a la Fonteta como parte de una gran plantilla que desde el principio de la temporada aspiraba a hacer grandes cosas.
Cargada de juventud, energía y sobre todo talento, la gallega estaba en el escenario perfecto para dar un paso en su todavía corta carrera. El momento de demostrar que es una jugadora destinada a la grandeza había llegado, en el mismo año que tendría la elegibilidad para presentarse al WNBA Draft. Todos los astros se estaban alineando para lo que iba a ir ocurriendo en los meses posteriores.
La temporada 2019-20 le sirvió para demostrar su categoría de poder estar en la Liga Femenina Endesa y cuando en mayo regresó a Valencia fue para quedarse y ser clave en una plantilla llena de jugadoras de primer nivel.
En la Supercopa a pesar de no lograr la victoria ante Lointek Gernika, Carrera supo aprovechar muy bien sus minutos. En todo momento ha quedado claro que a pesar de su inexperiencia el baloncesto estaba dentro de su cabeza. Es una jugadora que sabe leer a la perfección lo que está ocurriendo en la pista, y tener eso prácticamente de forma innata llevando apenas unos años de profesional habla muy bien de ella.
Con solo 14 minutos en ese primer encuentro de la temporada hizo 7 puntos, 8 rebotes y 14 de valoración, siendo la mejor del equipo en ese último apartado. Ya desde el principio dejando claro que iba a aparecer los días importantes.
Lo volvió a demostrar debutando en una Final Four europea y con la ausencia de Laura Gil por lesión se convirtió en la referencia de las suyas siendo el faro que las guíe de cara al aro sin prácticamente fallar tiros. Ya se podía decir de antes, pero en la EuroCup se notó de verdad que está naciendo una estrella en la joven gallega del equipo taronja.
Raquel terminó en ese enfrentamiento contra el Flammes Carolo con 22 puntos, 8 rebotes y 27 de valoración siendo la más destacada del partido. Hasta ese momento compitiendo a nivel continental había destacado más en defensa que en ataque, pero cuando llegó el escenario grande se convirtió en la primera espada de uno de los mejores equipos de la actualidad sin temblarle el pulso lo más mínimo.
Como tampoco le tembló en la final ante Reyer Venezia, donde en un partido apretado, con solo unos segundos en el marcador y estando por debajo en el marcador fue capaz de hacer un truco de magia tras un pase de Queralt Casas desde la banda para ir a la línea de personales. Tuvo que afrontar unos tiros libres con mucho peso en la espalda, pero no dudó ni un solo segundo para hacer que ambos terminaran dentro.
No solamente tiene el juego en su mente, sino que eso se suma a saber actuar a la perfección estando bajo presión. Una mentalidad inusual para una jugadora tan joven pero que invita a poder pensar en grande con ella durante la próxima década.
Y como los debuts nos se le dan nada mal, en su primera final de LF Endesa volvió a ser la jugadora que rematara el encuentro. En esta ocasión contra Perfumerías Avenida en el pabellón municipal de Würzburg. Como acostumbran estos equipos, se fueron a la prórroga y tras un pase sacado de la manga de Cristina Ouviña fue capaz de hacer una acción de canasta más falta para de nuevo sentenciar un enfrentamiento con un título en el horizonte.
Hay muchas jugadoras que en toda su carrera no afrontan lanzamientos a canasta tan determinantes como los que ha tenido Raquel con 19 años nada más en los últimos meses.
Por poner un ejemplo reciente, en la edición 2020 de la WNBA se vio como Phoenix Mercury ganó su primera ronda con un tiro sobre la bocina de Shey Peddy, una jugadora de 32 años que dijo posteriormente que es el primer game winner que tenía en sus manos desde que es profesional.
No es para nada habitual que una jugadora tan joven como Carrera tenga ya en su historial conseguir jugadas tan simbólicas y que han servido para ganar partidos importantes. Teniendo esto como los primeros capítulos de su historia, se hace difícil no imaginarla teniendo un gran impacto a nivel internacional.
Ya fue drafteada en la liga estadounidense por las Atlanta Dream y se convirtió en la elegida en mejor posición de su país. Todavía no jugará en los Estados Unidos, pero en el equipo de Georgia tienen muchas expectativas sobre ella, y es normal visto lo visto últimamente.
A principio de la temporada lo normal era escuchar que Raquel es una gran promesa, pero no ha tardado en demostrar que es toda una realidad del baloncesto español. Con el paso de los años será muy interesante ver su evolución y donde se encuentra su techo, ya que por ahora todo indica que será muy alto.
Tanto el Valencia, como la Selección de España como seguramente Atlanta tienen en Carrera a una pieza que les regalará grandes temporadas y que se encuentra lista desde ya para ser importante asumiendo balones importantes en sus manos. Una joven jugadora con un valor incalculable teniendo en cuenta el gran margen de mejora que tiene cuando se encuentre en un punto más avanzado de su carrera.
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Imágenes vía: fiba.basketball