Damian Lillard: «Nadar para que te maten en la orilla»
La jornada del viernes en la liga terminó con un duelo muy particular y en el que hubo de todo un poco: lesiones, expulsiones, grandes exhibiciones, y mucha polémica.
Los Trail Blazers viajaron a Salt Lake City para enfrentar al Jazz, en un back-to-back muy duro luego del intenso enfrentamiento que significaría el partido contra los Spurs en Portland. En dicho encuentro, Damian Lillard estuvo en cancha más de 35 minutos para liderar la victoria de los suyos.
Un partido enérgico en toda la extensión de la palabra, liderado durante grandes lapsos por el cuadro de Terry Stotts, llegando a tener una ventaja de hasta 16 puntos. Es clave recalcar que los Blazers iniciaron el partido con más ausencias de lo acostumbrado, ya que agregando las bajas indefinidas de jugadores como Rodney Hood, Zach Collins, Jusuf Nurkic, entre otros; enfrentarían a Utah sin un Hassan Whiteside que sí estuvo presente frente a San Antonio, y un Nassir Little, que se perdió ambos duelos.
El dominio sería claro durante la primera mitad para los de Oregon, a pesar de sufrir bajas no presupuestadas dentro de los dos primeros cuartos. Casi para finalizar el primer cuarto, una jugada desafortunada entre Anfernee Simons y Royce O’Neale que propició la caída irregular del joven atacante de Portland, chocando el cráneo de este contra la duela casi sin amortiguación, lo dejaría fuera el resto del encuentro.
No obstante, las malas seguirían rondando a los jugadores del equipo visitante. Trevor Ariza sería expulsado luego de acusar fuertemente a un arbitro tras no marcar una falta. El alero de origen dominicano perdió los estribos y dejaría a su equipo con desventaja numérica, con sólo 7 jugadores disponibles para disputar el resto del encuentro: Carmelo Anthony, CJ McCollum, Mario Hezonja, Damian Lillard, Caleb Swanigan, Wenyen Gabriel y Gary Trent Jr.
Los siguientes minutos serían agotadores para los Blazers, con un Damian Lillard que tendría una magnifica actuación durante la primera mitad, llegando a promediar buenos porcentajes en tiros de campo, y llegando a tener una racha de 5/5 en triples. Más temprano que tarde el cansancio cobraría factura a los elementos que se esforzaban de manera incesante sobre el Vivint Smart Home Arena, sobre todo la figura fatigada de la estrella de Portland, bajando de manera drástica sus indicadores y terminando en un 57,7% en triples luego de rozar la perfección con un 100% en la misma estadística.
El equipo de Quin Snyder supo aprovechar muy bien la baja de juego de los visitantes, imponiendo condiciones en el último periodo, llegando a estar arriba hasta por 7 puntos. Los minutos finales se jugarían a una posesión de diferencia y en la última jugada el partido llegaría a su clímax. Con unos segundos restantes, y con los Blazers buscando el empate, la polémica estaría presente en la cancha. En una jugada donde Damian Lillard penetró el área para intentar igualar el marcador, una falta por tapón ilegal del francés Rudy Gobert no sería apreciada, lo que desataría la rabia en los jugadores de Portland.
According to multiple players, the officials description on this call said that it “wasn’t even close” to a goaltend, via @CHold
Makes you wonder what the hell some of these refs are even watching🧐
— Hoop Central (@TheHoopCentral) February 8, 2020
El juego terminó con victoria para los de Utah por 114 a 117, con mucha polémica. La indignación trascendería en distintos medios masivos y redes sociales, por parte de reporteros, fanáticos y por los mismos jugadores alzando la voz e indicando que situaciones así no deben quedar impunes. Además, algunos jugadores aseguran que los árbitros dijeron: «Ni siquiera estaba cerca«… Lo que hace pensar, ¿a dónde estaban mirando? ¿Qué querían ver? Esto deja más preguntas que respuestas. Desde aquí solo podemos decir lo mismo que Gonzalo Vázquez en Twitter: «Lillard llevaba razón«.
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