Los Warriors ‘vuelven’ a casa por Navidad
Uno de los partidos de la jornada de Navidad que se había quedado algo cojo era uno de los mejores duelos de los playoffs en los últimos años. Los Houston Rockets y los Golden State Warriors han regalado grandes series en Finales y Semifinales de la Conferencia Oeste, pero las bajas en San Francisco les han dejado fuera de combate esta temporada. Una situación que ha afectado mucho a las cadenas televisivas que ya contaban con los derechos de varios de sus partidos durante el curso.
Una vez comenzando el encuentro, el contexto desapareció y la magia del baloncesto ocurrió en La Bahía. En los primeros minutos se vio claro que iba a estar muy igualado y que los texanos tendrían que sacar su mejor versión para llevarse la victoria. Una narrativa cargada de sorpresas y que hasta el momento se convertía en el juego más vistoso de la noche. Los Boston Celtics sacaron amplio margen a los Toronto Raptors en el partido inaugural, algo que repitieron los Philadelphia 76ers contra los Milwuakee Bucks. Para abrir la boca antes del duelo de los angelinos, los Warriors dieron su mejor versión hasta el momento en la season.
La defensa ejercida sobre James Harden fue una de las claves, obligando a Russell Westbrook a tirar 9 de los 12 primeros tiros. Una declaración de intenciones muy clara. Además, el base de Rockets estaba lanzando con un 22.2% en tiros de campo, siendo un quebradero de cabeza para Mike D’Antoni. El escolta de Houston solamente consiguió anota 3 puntos durante el primer cuarto, siendo algo inusual en alguien que ya no sorprende cuando anota 40 o más.
En el 2Q, es cierto que Harden empezó a despertar y meterse en el encuentro – con 16 puntos en ese periodo -. Aunque la mejora del ’13’ no sirvió para mucho, dado que los Golden State se quedaron a solo un par de posesiones de empatar cuando llegaron al descanso. Un marcador que aseguraba una segunda parte de infarto y en la que muchas televisiones tuvieron su regalo de Navidad al no tener un partido sin expectación.
Ya pasado el ecuador, la defensa de los Warriors empezó a ser la más intensa que han mostrado en toda la temporada. Un buen planteamiento por parte de su coach y una buena respuesta por parte de los jugadores para conseguir dejar a Harden sin anotar en todo el tiempo que estuvo en la cancha – del 3Q -. Algo muy llamativo, y más viendo que además de no meter puntos en un cuarto entero, tampoco había sacado una falta de tiro ni una en bonus.
Los rivales defendidos por Draymond Green – al empezar el 4Q – llevaban un 3 de 13 en lanzamientos de campo, teniendo un gran impacto defensivo. La mejor versión del ala-pívot a ambos lados de la cancha estaba siendo uno de los factores que estaban permitiendo que durante los últimos cuartos – los Rockets – no metieran más de 20 puntos.
Un dato llamativo es que el único partido de Harden en los últimos años sin tirar tiros libres ha sido contra Minnesota Timberwolves el curso anterior. En el arranque del último cuarto, aún no había acudido a la personal. No fue hasta que quedaron 7:59 en el reloj para que – en una jugada de triple y falta – ‘La Barba’ fuera por primera vez a la línea de castigo.
Glen Robinson III y Draymond Green metieron canastas claves para sacar diferencia a menos de 5 minutos del final. Desde ahí, los de Houston desaparecieron completamente del partido y se quedaron con un rato para asimilar lo ocurrido antes de que acabe el tiempo del reloj. Una noche que se recordará porque Steve Kerr consiguió desmantelar una de las mejores ofensivas de la NBA con su plantilla desarmada.
El marcador final quedó por 104 – 116, siendo ‘Dray’ el más destacado. Unos números de 20 puntos, 11 rebotes – 3 ofensivos -, 3 asistencias, 1 robo y las sensaciones de ser el líder que se le pide ante las bajas de Stephen Curry y Klay Thompson. Esta gran actuación ha sido un pequeño reflejo de lo que ha sido esta franquicia en los últimos años. Quizá Kerr haya querido hacer un recordatorio de lo que son capaces ante la gran audiencia de la jornada navideña en TV nacional. Se podría decir que los Warriors ‘han vuelto’ a casa por Navidad para dar una sorpresa a sus aficionados.
https://www.youtube.com/watch?v=24C9ovK_h7o
Con esta victoria los Warriors firman la tercera consecutiva de la temporada, aunque siguen estando muy lejos de conseguir hacer una remontada histórica. La diferencia de récord con los puestos de playoffs sigue siendo abismal y les queda mucho por remar para que en la directiva se piense en regreso a las pistas de los Splash Brothers durante esta temporada.
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