Semana a semana (#4): Ya estamos todos

Semana a semana (#4): Ya estamos todos

19/11/2019 0

La última semana tiene dos nombres escritos en permanente: Paul George y Carmelo Anthony. En efecto, Melo. Cuánto tiempo sin escribir este nombre a secas, sin rodearlo de dudas y probabilidades. Simplemente Carmelo. Favorito de muchos, un jugador que marcó (junto a otros) una generación de baloncesto y que otros muchos daban por imposible su vuelta a las canchas de la NBA. Pero ha vuelto, menos mal. Después de un año fuera de las canchas, sin encontrar equipo después de abandonar Houston, en Portland Trail Blazers han decidido darle una oportunidad. O él a ellos viendo cómo está el patio en Oregon. Porque de los Blazers tenemos que hablar como una de las decepciones, de momento, de la temporada. Aún no ha jugado pero ya tenemos ganas; en los próximos días tendremos a Melo en pista. Y que no se nos olvide Paul George, carajo. Algunos ya ni se acordaban de él y ha entrado por la puerta grande en su nuevo equipo. Los Clippers ya le han visto anotar, y de qué forma… Ganamos el salto inicial y empezamos a distribuir juego.

Paul George ha vuelto, y a qué nivel

70 puntos en 44 minutos. No hacen falta más caracteres para representar la obra que ha sido la llegada de Paul George a los Clippers. Una eficiencia inusitada. Tras la decepcionante derrota contra unos Pelicans con tan solo Jrue Holiday al volante, PG quiso resarcirse ante los Hawks en casa. Su debut en el Staples Center como local fue una delicia. Entre la inexistente defensa de los jugadores de Atlanta y su efectividad de cara al aro, terminó con 37 puntos. «Gran partido, pero como el de otras muchas estrellas en la liga», puedes llegar a pensar si solo miras este dato. Pero claro, si te añado que lo hizo en tan solo 20 minutos sobre el parqué las sensaciones cambian. O deberían. Cuando George recibe la bola siempre pasan cosas, es un seguro de vida en ataque. Y es que pocas veces desperdicia oportunidades o toma malas decisiones. Justo lo que necesitan los Clippers: una estrella inteligente y sin excesivo ego capaz de asumir las responsabilidades necesarias en cada momento de la temporada. Y con los descansos de Kawhi para llegar en perfecto estado a PlayOff, va a ser la estrella principal de su equipo durante la temporada regular. Ganaron de 49 a los Hawks, por cierto. Que no nos digan que no lo contamos todo.

Fultz y sus Magic salen a flote

De Orlando hay que hablar y seriamente. De los Magic de Fultz y Isaac. Porque durante las primeras semanas de competición las sensaciones del equipo de Florida no fueron buenas. La defensa que había los había caracterizado en la segunda parte de la temporada pasada y las terminaría catapultando hacia PlayOff parecía haber desaparecido y el apenas fluido ataque que ofrecían no deparaba lo mejor. Sin embargo, todo ha cambiado. Ganar siempre mejora las cosas aunque no cambien los preceptos para hacerlo, por supuesto. Sin embargo, no es el caso. Las victorias han venido de forma merecida porque han mejorado su juego. El equipo sigue teniendo a Vucevic como arma principal, claro, pero el ejercito está cada día más preparado. Isaac ha sido una referencia defensiva de primer nivel durante los últimos partidos. Se ha erigido como defensor estrella y asumido galones enfrentándose a los jugadores franquicia de los equipos rivales. Robando balones y taponando con sus inmensos brazos pero sobre todo, complicando la labor al máximo a su atacante. De sus manos salen muchos momentos de explosión de los Magic. Pura efervescencia. El otro nombre a analizar es el de Markelle Fultz. La promesa que muchos creían ya acabada. Su llegada a Orlando, un proyecto de medianías a largo plazo le está permitiendo crecer y adaptarse a la NBA. Cada día vemos más detalles de este número uno del draft y más que le quedan por enseñar. Cuando gane en liderazgo, confianza y regularidad tendremos estrella para rato. Aún es pronto pero ilusiona. Orlando ha ganado 4 de sus últimos 5 partido; esta última semana ha ganado 3 y solo perdido 1. Empezaron el curso 2-6 y ya están 6-7. Los Magic de Clifford siguen siendo un problema para cualquiera.

Los preocupantes Spurs y Blazers

Y aquí llega lo negativo. Porque podríamos hablar de los decepcionantes últimos días de los Sixers tras ser los últimos invictos de la liga pero ellos al menos no pasan penurias en la clasificación. En San Antonio y en Portland existe preocupación. Los primeros empezaron 4-1 el curso y desde entonces solo han ganado un partido. Han llegado a perder 5 partidos seguidos, racha que se mantiene abierta, algo que no veía Popovich desde hace 8 años. Donde peor está respondiendo el equipo es en la defensa y en el rebote, pierden muchas opciones ahí. Permiten demasiadas segundas opciones y no defienden de forma eficiente las primeras. Pero dejemos una semana más al bueno de Gregg, si alguien lo merece en la NBA es él. Vamos con la que hasta ahora es la decepción de la liga. Los aficionados de los Blazers tenían muchas esperanzas puestas en esta temporada. Tras llegar a las Finales de Conferencia y ver como CJ McCollum se consolidaba como una genial segunda espada de su proyecto esperaban otro curso a la altura. Algo a lo que de momento ni se acercan. Un comienzo muy irregular de CJ de cara al aro, las lesiones de piezas importantes de la plantilla como Nurkic y Collins y una pobre defensa han hecho que los Trail Blazers tengan uno de los peores récords del Oeste. Ellos y los Spurs terminan la semana compartiendo récord (5-8) después del último enfrentamiento entre ambos. Los de Portland llegaron a ganar de 22 en el primer cuarto y de San Antonio de 10 en el tercero. Te puedes imaginar cómo fue el partido. Terminaron ganando los Blazers porque lo necesitaban más o porque así lo quiso el baloncesto. La noche tuvo de todo: emoción, parciales inmensos, buen baloncesto de ambos equipos por momentos y polémica arbitral. Estos dos equipos merecen mejorar.

Y hasta aquí una semana que ha dado para mucho, como suele suceder. Los Suns siguen dando espectáculo y Arizona ya se ha convertido en uno de los estados que más cuesta visitar esta temporada. Los Celtics rompieron en Sacramento una racha de 9 victorias consecutivas con una bomba de Marcus Smart que no quiso entrar, literalmente. Los propios Kings han vuelto a la senda que le llevó a ganar partidos el año pasado; Buddy Hield es un anotador compulsivo. Los Knicks completaron la humillación en New York que empezaron en Dallas: ganaron los dos partidos de la temporada a los Mavericks mientras Luka Doncic se sigue consagrando como uno de los mejores jugadores de la liga. Y los Lakers, que ya son los líderes en solitario de la NBA y cada día se les ve más sólidos como conjunto. No son LeBron y Anthony Davis contra el mundo, ni muchísimo menos. Y como suele decir un adicto al baloncesto que conozco, hasta la próxima semana compañeros de madrugadas.

 

Sorpresas positivas de la semana: Orlando Magic (3-1), Sacramento Kings (2-1) y Hoston Rockets (4-0)

Las decepciones: San Antonio Spurs (0-4), Philadelphia 76ers (2-2) y Atlanta Hawks (1-4)

 

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Héctor Rosales
Administrador.
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