Virginia: Los vigentes campeones siguen en forma
El equipo de donde salió el pick 4º del último draft y que salió campeón del March Madness 2019 ha empezado la temporada donde mismo lo dejó. El vigente campeón no quería empezar mostrando debilidades a la hora defender el título, y lo están logrando. El primer partido fue ante Syracuse el 7 de noviembre. Un juego donde solamente los 12 puntos de Mamadi Diakite y los 12 rebotes de Jay Huff sirvieron para ganar por 48 – 34.
La entidad de Virginia en el 2018/19 se destacó por la defensa, y han mantenido esa faceta como su punto más fuerte. En los siguientes partidos fueron capaces de encajar menos de 50 puntos también – siendo victorias contra James Madison y Columbia -. Durante ambos juegos el máximo anotador fue Diakite, quien empieza a destaparse como la principal referencia ofensiva de la plantilla. En los cursos anteriores no fue capaz de superar los 10 puntos de media, pero ahora en su cuarta temporada incorporando un tiro fiable de triple empieza a codearse en dobles dígitos. Sus 13.2 puntos de media son el máximo de un jugador de su equipo.
El jugador más importante del equipo el año pasado tenía un perfil muy similar al actual ala que tienen. Las cualidades físicas son muy parecidas entre Hunter y Diakite, siendo este segundo unos centímetros más alto. Los Cavaliers parece que tienen claro el tipo de jugador que poner como líder de su defensa, y es que Mamadi promedia 1 robo y 1 tapón por partido.
El plantel de Virginia se encuentra con otros jugadores como Braxton Key, con bastante experiencia en la liga después de varias temporadas. En este caso – con Key – tenemos un base que lleva más de 100 partidos en la NCAA y que puede ayudar a firmar un buen año colectivo. En partidos – como la victoria ante UMass que fue el máximo anotador – consiguió aportar para mantener esa racha de invictos del arranque de regular.
Para ganar a Arizona State, el líder en la ofensiva fue un freshman, sumándose a la fiesta de los Cavs. Casey Morsell se fue hasta los 19 puntos, acompañado de 8 rebotes de Braxton, quien domina este apartado estadístico en la plantilla. Una buena pareja que ha permitido liberar por momentos de carga a Diakite y poder ejercer unos sistemas más corales, al estilo del año pasado.
En la creación de juego tienen a Kihei Clark, un sophomore bastante propenso a firmar triples-dobles. Durante su debut – ante Syracuse – se quedó en 10 puntos, 11 rebotes y 7 asistencias, siendo un motor de baloncesto para estar a los mandos sobre la pista. En su segunda temporada se encuentra duplicando todas su estadísticas, aunque una mejora en los porcentajes es algo que se le pedirá a la hora de evolucionar hasta profesional.
Una cosa que destaca en Virginia es el salto de importancia que existe entre los favoritos del entrenador y el fondo de la rotación. No hay ninguno que promedie entre 10 y 20 minutos, siendo todos con mucha relevancia o jugando el ‘tiempo de la basura’. En el límite se encuentra Francisco Caffaro, el freshman argentino, con 8.8 minutos de media. El nacido en Santa Fe se encuentra ante una buena oportunidad de ser un jugador de rol en un posible candidato a campeón del March Madness, pero debe de trabajar para ello.
En los últimos partidos consiguieron dejar a Maine por debajo de 30 puntos y ganaron a North Carolina en un duelo de titanes. El problema para ellos llegó con perder el invicto ante Purdue, pero al menos el récord de 8 – 1 no es para quejarse. En el comienzo de regular han cumplido, pero, ¿hasta dónde serán capaces de llegar?
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