La esperanza de Charlotte
La temporada de los Charlotte Hornets está siendo mucho mejor de lo esperada. Con la salida de Kemba Walker, el líder del equipo por más de 5 temporadas, el equipo buscaba una nueva identidad. Con no muy buenos movimientos en el mercado, más una elección en el draft muy inesperada, se esperaba que los Hornets sigan en lo más bajo de la clasificación. Aun así, contra todo pronostico, el equipo está jugando muy bien, y a pesar de que no lleguen las victorias, hay esperanza en Charlotte. De igual manera, con un récord de 6 victorias y 7 derrotas, los Hornets están séptimos en la conferencia este.
Muchos nombres lo están haciendo de maravilla, lo mejor es que casi todos jóvenes. Sin embargo, antes de nombrar algunos jugadores, vamos a hablar un poco de sucesos que dan aun más esperanzas a los fans del equipo de North Carolina. Lo primero, y aunque suene un poco cruel, la lesión de Nicolas Batum les vino bastante bien sobre todo al resto de jugadores. Pudieron ganar muchos minutos, y sobre todo confianza y tiros que con el francés no tendrían, por lo que creo que eso estuvo bien.
Lo segundo, arraigado con lo de Batum, es que la mayoría de jugadores con «contratos tóxicos» terminan este año, es decir, que Charlotte ya no deberá seguir pagandoles ni dándoles minutos. El mismo Batum (aunque tiene player option que casi seguro es aceptada), Bismack Biyombo, Marvin Williams y Michael Kidd-Gilchirst. También decir de Cody Zeller, que tiene dos años de contrato aún, pero que es uno de los que mejor está jugando en esta temporada dentro de los «overpaid». De hecho está en su mejor año, con casi un doble-doble de 13 puntos y 9 rebotes de media.
Ahora si, vamos a comentar a algunos jugadores en especifico que están jugando a las mil maravillas:
Terry Rozier y su experiencia como «Celtic»
Terry Rozier fue el gran fichaje que tuvieron los Hornets este verano. La franquicia fue bastante criticada por eso. En tres temporadas cobrará alrededor de 54 millones, mientras que Kemba en sus 8 temporadas tan solo 53. Además, por lo que demostró en Boston, el base parecía que sería la nueva super-estrella de la liga. Sin embargo, no es ni de cerca eso. Pero es algo más eficiente, está jugando demasiado bien, y cumpliendo el rol que necesita el equipo para así ganar. De momento le está saliendo más que bien.
Actualmente se encuentra con 16.9 puntos, 4.7 asistencias y 4.0 rebotes. Aun así, la experiencia que adquirió tras el jugar para una franquicia como Boston, con esa mentalidad ganadora, yo creo que está ayudando muchísimo al equipo.
Devonte’ Graham como candidato al «MIP»
El otro base de Charlotte que está impresionando a todo el mundo. Uno de los mayores talentos de la plantilla, que en su año rookie no se pudo terminar de disfrutar por el hecho de que estaba Kemba. Ahora mismo está consiguiendo doblar casi todos sus números, además de aprovechar una mayor cantidad de minutos, siendo el que más juega de la franquicia. Destacar su gran visión de juego y su forma de hacer mejor a sus compañeros, que es algo que se le da muy bien, y sin dudas que es uno de los motivos por los que te dan ganas verlo jugar. Su gran capacidad anotadora es otra virtud. Su partido de 35 puntos ante los Pacers, o en el que anotó 9 triples contra los Knicks son claros ejemplos de su facilidad para conseguir puntos.
Actualmente, con 18.8 puntos, 7.1 asistencias y 3.5 rebotes lo consideramos como «el mejor» de los Hornets. Sus 4 años en la universidad de Kansas, más el primero como rookie, son todas enseñanzas que se le han ido dejando al base para que hoy pueda mostrar lo que realmente es. A diferencia del año pasado, con 4.7 puntos, 2.7 asistencias y 1.6 rebotes es uno de los máximos candidato a llevarse el premio al jugador más mejorado, y sin dudas, si su juego se ha incrementado y ha mejorado una locura.
P.J. Washingthon, el rookie que nos sorprendió a todos
Uno de los rookies que menos expectativa se tenía, sin duda que era P.J. Washington. Tal vez por el hecho de ser Ala-Pivot, o que el boom de Zion no nos dejaba ver el potencial de todos. Pero sin dudas que nadie se esperaba un rendimiento tan bueno de él. Con un físico bastante definido, el jugador es muy vertical y bueno a la hora de atacar hacia el canasto, además de ser muy atlético a la hora de finalizar. Además de que tiene un tiro de tres que es regular, pero confiable. Debe trabajarlo mucho eso sí.
Actualmente, promedia 13.1 puntos, 5.8 rebotes y 1.5 asistencias. Nada mal, también teniendo en cuenta que la mejoría de Zeller lo está opacando un poco.
De igual manera, la temporada de Hornets está siendo muy buena. Están jugando en equipo, y aunque no haya una «estrella a seguir» el equipo está dando con la tecla y sabe como jugar. Todos están muy comprometidos y a pesar de la falta de nivel en algunos casos, la actitud es lo que los está llevando hacia delante y les da esperanza para los de Charlotte.