Unos Pelicans que ilusionan, y sin tener a Zion
La jornada inaugural de la NBA no se podía presentar de mejor manera. Dos partidos, cada uno con su contexto, pero ambos cargados del baloncesto que había faltado durante todo el verano. En la primera cita se realizaría la gala de celebración del título, que acabaría en festejo del primer triunfo del curso, y adornar el techo del pabellón con él por parte de los canadienses. El otro encuentro enfrentaría a los conjuntos angelinos en un choque de hype que no querían hacer esperar desde las altas esferas de la liga.
El duelo que nos concierne ahora, es el primero. Un comienzo marcado por la felicidad de los Raptors por rememorar ese primer anillo que llevaron a la ciudad. Una franquicia que sin Kawhi Leonard tenía la misión de demostrar lo que son capaces. Fred VanVleet incluso añadió en una entrevista referente a eso:
«Es el mejor jugador con el que he compartido equipo (Kawhi), pero cuando no jugaba él compartíamos mucho más la pelota y nos lo pasábamos mejor».
Enfrente tenían a un equipo que llegaba lastrado por una mala noticia: La baja de su número 1º del draft por varias semanas. En New Orleans tenían que afrontar este tramo inicial sin Zion Williamson, pero su General Manager tiene claro quien es el jugador más importante:
«La principal referencia del equipo es Jrue Holiday. Es el jugador más infravalorado de la NBA».
Una vez con el balón en juego, el primer parcial sorprendió con un dominio de los Pelicans sin la necesidad de que el escolta entrara en presencia anotadora. La buena racha terminó cortada con una a favor de Toronto que equilibró la balanza e iba a regalar un cruce bastante igualado durante el transcurso de los cuartos.
El 4Q, dejando fallos propios de falta de dinámica y en algunos casos propiciados por juventud en el lado de los ‘Pels’, fue con un gran sabor de boca y llegando a una prórroga. ¿Hay alguna forma mejor de comenzar la temporada?. Los Raptors, en una gran noche de Pascal Siakam, Kyle Lowry y el ya citado VanVleet, se llevaron el triunfo final por 130 – 122. En esta primera toma de contacto con el 2019/20 y el nuevo proyecto de David Griffin, se pueden sacar algunas conclusiones bastante interesantes sobre los de Louisiana.
https://www.youtube.com/watch?v=hMTlKpnFd0U
Nickeil, sin miedo a nada
El novato ha demostrado que lo visto en la pre-season no fue una coincidencia y que es capaz de tener el mismo atrevimiento que tenía en la NCAA. Es un gran talento y por lo visto no se arruga ante nadie ni le tiembla el pulso para lanzar, aunque cabe recalcar que no ha tenido especialmente la mejor noche en porcentajes. Una mejor carta de tiro le hubiera brindado un debut con mejores recuerdos.
En otros aspectos del juego fuera de la anotación, como aportar en circulación, rebotear y recuperar balones ha sido muy activo, lo que le deja como un exterior bastante completo y no como un ‘mete puntos’. Un registro de 1 acierto de 7 intentos desde el perímetro le han dejado en mal lugar como francotirador, pero una vez tenga ritmo de competición puede ser un buen complemento. Su problema en este partido ha sido incluso el exceso de confianza al acumular tantos errores sin dejar de intentarlo y buscar otras opciones.
¿Un nuevo Ingram?
Uno de los mayores problemas que tiene el alero de Pelicans es la necesidad de mucho balón en sus manos para generar para si mismo o sus compañeros. En la estadística avanzada refleja como es uno de los jugadores que más amasa la bola en sus manos, algo que no interesa para el ritmo rápido que quieren plantear en su equipo actual.
Desde la pre-temporada, comentó Antoni Daimiel en la retransmisión de Movistar que han tenido entre los objetivos de NoLa el cambiar esta parte del juego en Brandon, y por ahora parece que responde bastante bien a los estímulos. ‘El nuevo Ingram’ ha comenzado con muy bien pie la regular y se puede augurar un gran año. En el tramo final a pecado un poco de individualismo, pero en lo general ha primado por aprovechar las ventajas que se generan para otros.
Entrando un poco en sus números, se aprecia como en las dos partes de la pista rindió bastante bien, con 22 puntos y 5 asistencias en el lado ofensivo, mientras que 5 rebotes, 1 robo y 2 tapones le han hecho importante en defensa.
Melli y su fiabilidad en los lanzamientos
Un jugador que ha llegado un poco desapercibido en un mercado tan movido, pero que puede ser uno de los tapados de la temporada. En el tiro exterior ha sido un arma letal y que asegura una gran alternativa para abrir la pista cuando quieran jugar a ‘penetraciones de Zion sistema’.
Es una gran pieza de rotación que, dando la mitad que en su debut por noche, puede ser fundamental para los esquemas de New Orleans y ganarse una importancia inesperada, a priori, en la plantilla. Terminó con una certeza del triple casi impecable, con 4 aciertos de 5 intentos. Con el avance de la temporada, si sigue mostrando una versión similar al partido contra los Raptors podría incluso acabar como center titular para contrarrestar la falta de tiro en Lonzo Ball y poder sacar desde la segunda unidad a J.J Redick.
