Charlotte Hornets ¿Empiezan a confiar en los jóvenes?
Los Charlotte Hornets, esa franquicia caracterizada por el gran base Kemba Walker, que a pesar de que este verano se haya ido, con o sin él eran un equipo sin rumbo. Teniendo un All-Star en sus filas, a Michael Jordan estos años se le hizo imposible construir un equipo competitivo, lo único por lo que son recordados son por sus contratos tóxicos.
Una franquicia en donde está temporada 2018-19, Nicolas Batum, Bismack Biyombo, Marvin Williams, Michael Kidd-Gilchirst, y Cody Zeller cobraron por individual más que el propio Kemba Walker. Sin dudas, una gestión de locos en la que incluso, noticias y rumores decían que en este verano no se le ha ofrecido ni el super-máximo (221 millones por 5 años) ni el máximo (148 millones por 4 años) al base, algo que en mi opinión, me parece una total falta de respeto.
Por suerte, todos estos problemas a nivel de salarios, para este verano y el próximo, ya no serán problema, pues, casi todos los jugadores que nombré antes son expiring, salvo Batum que tiene una player option de 27 millones y Cody Zeller que le queda otro año garantizado por 15 millones.
Ya pensando a futuro, y con la salida de Kemba, el «fichaje estrella» de los Hornets, fue el de Terry Rozier III, un base que viene con grandes ambiciones, sobre todo a nivel individual donde tiene muchas ganas de demostrar al mundo que puede convertirse en uno de los referentes del mundo. Su contrato desde el principio fue muy prejuzgado y dudoso, pues en tres temporadas cobrará 58 millones de dólares, mientras que Kemba Walker en toda su estancia en el equipo de Carolina del Norte (8 temporadas) ha cobrado 59 millones, tan solo un millón más.
Por otro lado, creo que ya es momento de empezar a confiar en los jóvenes. Si es cierto que su young core no tiene el nombre de la que tienen equipos como Atlanta Hawks, Memphis Grizzlies, New Orleans Pelicans, etc. Pero jugadores como Malik Monk, Miles Bridges, el mismo Terry Rozier, P.J. Washington,Dwayne Bacon, Devonte’ Graham, e incluso Willy Hernangomez no suenan nada mal. Lo que está claro, es que si no les das confianza ni minutos, nunca van a poder progresar y demostrar de que están hechos. Por eso, si por un segundo pudiera ponerme en la piel de James Borrego (entrenador de Hornets), no tengo ni una sola duda de poner a jugar a los jóvenes, y si alguno de los «contratos tóxicos» se queja, le digo que se la aguante.
Aunque suene loco, tengo fe en que estos Charlotte Hornets puedan salir rápido de este vacío, y no que sigan muchos años en lo más abajo de la liga. Hay deben de tener suerte con buenos picks. La clave está en que los ojeadores recomienden buenos jugadores, y con eso, empezar a brillar en un futuro, porque para hacer las cosas a medias no las hagamos, y justamente creo que eso es lo que necesitan, empezar de nuevo.