¿Son los 76ers el mejor equipo del Este?
Hay que ponerse en contexto con las últimas temporadas y las dificultades que han sufrido durante «El Proceso«. Un largo camino que ha ido teniendo varias pausas para descansar. Esas paradas han sido las noches del Draft. Altas elecciones, grandes expectativas, promesas con un talento descomunal, pero sobre todo, una tormenta de lesiones que ha ido atrasando todo. Los jóvenes que han ido llegando a la disciplina, han ido siendo bajas. Pareciendo una maldición que tenía la franquicia y no les permitía avanzar en sus planes de futuro pese a estarlo haciendo todo bien.
La llegada de Joel Embiid estuvo marcada por el drama. Una mala racha personal y problemas familiares, sumado a problemas físicos hicieron pender de un hilo su carrera en la NBA. Nadie dudaba de su talento innato para jugar a este deporte. Un pívot llamado a dominar la competición en los próximos años. Sin tener continuidad, en 31 partidos durante su primera temporada fue capaz de promediar más de 20 puntos. Despertando la llama en unos aficionados que se encontraban pasando por un mal momento.
Posteriormente fue seleccionado Ben Simmons. Un jugador totalmente distinto a lo que estábamos acostumbrados a ver. Una pieza que junto al center, estaban llamados a ser una gran pareja. Algo que tuvo que esperar a que el australiano se recuperara de una lesión que le alejó todo un año de las pistas. Aunque como todos conocemos no le cortó la progresión y le permitió ganar el premio a mejor rookie. Haciéndolo por encima de grandes novatos como Donovan Mitchell o Jayson Tatum.
Simmons ha sido capaz de cubrir al jugador que para ellos era la guinda de la reconstrucción. Un Markelle Fultz que fue el pick 1º del Draft de 2017 y apenas disputó partidos. Aunque si consiguiendo el logro de ser el más joven en registrar un triple-doble en la historia de la liga. Pero sin terminar de tener la importancia que se esperaba. Pasan los meses y sigue siendo una incógnita lo que será de su carrera. Como mismo lo es su continuidad en el equipo de Philadelphia. Aún sin Fultz, «The Process» ya había terminado el año pasado con la gran irrupción en los Playoffs de este equipo. Y por si quedaban dudas han incorporado a una súper estrella como es Jimmy Butler. El equipo tiene lo necesario para competir por el anillo y no dejar pasar la oportunidad que se les ha presentado.
¿Son candidatos a ganar la Conferencia?
Desde la salida de Lebron James y dejando vacío el trono del Este. Han quedado muy abiertas las especulaciones sobre quien será el equipo que se lleve la gloria. Dado que la competencia entre las grandes potencia del Atlántico es muy elevada:
Los Boston Celtics vienen de ser sub-campeones de la Conferencia. Quedándose muy cerca de romper la hegemonía de «The King» durante su estancia en ella. Aunque no se encuentren a su mejor nivel y con varios factores adversos. No se puede negar que este equipo, liderado por Kyrie Irving siempre va a resultar una gran amenaza. Tener a uno de los mejores entrenadores de la NBA es un seguro de hacer un buen papel.
Los Toronto Raptors vienen de ser la víctima favorita de LeBron durante las últimas campañas. Impidiéndoles avanzar hasta una final. La llegada de Kawhi Leonard, sumada a la salida de la estrella de los Cavs, ha cambiado el panorama totalmente. El nuevo entrenador y el nuevo líder sobre la cancha hacen pensar que los canadienses pueden dar ese salto que no habían conseguido con DeRozan y Casey.
Los Milwuakee Bucks ha dado con la clave para convertirse en un equipo contender. Tenían la materia prima, pero les faltaba saber utilizarla. Lo que ha hecho que la firma de Mike Budenholzer haya sido fundamental para poder soñar con verse compitiendo por el anillo de la NBA. Antetokounmpo ha dado el salto hasta ser candidato al MVP gracias a la mejora implantada en los sistemas. Las cuales buscan principalmente el beneficio de la estrella.
Los Indiana Pacers han quedado algo cojos con la lesión de Victor Oladipo. Por suerte para ellos son uno de los equipos más colectivos. De cara a la postemporada va a ser muy importante que sean más un bloque que nunca y remen juntos hacia el objetivo común. El cual debería de ser avanzar una ronda después de una brillante temporada regular hasta el momento.
Es muy complicado considerar a uno de estos superior al resto. A día de hoy cualquiera podría coronarse como el campeón de la Conferencia. Incluyendo en los «5 fantásticos del Este» a los 76ers, la igualdad que se ha generado es muy bonito para los aficionados. Por primera vez en mucho tiempo, existe esa duda de quien será capaz de sobreponerse al resto.
¿Tienen las piezas para triunfar?
La plantilla que tiene en sus manos Brett Brown es de primer nivel. El Big Three que ha formado con dos elecciones del draft y Butler, era algo que impensables años atrás en Philadelphia. Uno de los mejores bases de la actualidad, el mejor pívot del momento y uno de los jugadores con más garra en la pista que se recuerden. Es algo utópico lo que han logrado crear paso a paso y sin ningún tipo de prisa.
Ben Simmons es un jugador más que especial. A parte de haber ganado el ROY, ha demostrado que tiene casta de campeón. A falta de un tiro fiable, ha destrozado las mejores defensas de la NBA. Este chico es la mezcla perfecta de un físico privilegiado para jugar al baloncesto y unas habilidades que le han dado el status de estrella. Con menos de dos temporadas, el 25 de Phila ha recibido los elogios de todos los grandes nombres, como el mismísimo LeBron James, el cual dijo:
«Mi jóven rey es el siguiente en la fila. Cada noche es mejor y mejor.
Siempre es muy divertido competir contra él y Joel Embiid.»
Un Embiid que se ha metido de lleno esta temporada en la lucha por el MVP. Un pívot más que dominante sin dejar a un lado las habilidades con el balón. El jugador perfecto para el baloncesto moderno y uno de los mejores del planeta. Junto a otros grandes talentos como Antetokounmpo o Irving, además de competir por el premio individual más ansiado, lo hacen por ser el nuevo rey del Este.
Jimmy Butler era lo que necesitaban en este equipo para ser un contender más que serio. La experiencia que va a aportar este jugador a sus jóvenes compañeros les ayudará a crecer, tanto en lo personal como en lo deportivo. Pese a ser un complicado gestionar la personalidad de estas tres figuras. Si se consigue y desemboca en una buena química, debe hacer temblar al resto de la NBA.
Imágenes vía: NBA.com