Dinwiddie, del anonimato al estrellato
Hoy venimos a hablaros del escolta de los Brooklyn Nets, que, al igual que el equipo está haciendo una temporada brutal, dando unas prestaciones muy por encima de lo esperado y jugando un baloncesto de muy alto nivel.
Desde la lesión de Caris Levert (quien estaba siendo el mejor), gente como D’Angelo Russell y Spencer Dinwiddie han dado un paso al frente y ahora mismo tienen a la franquicia Neoyorquina en sexto lugar de la conferencia este gracias a una racha de 8-2 en los últimos 10 partidos con cuatros de esas victorias llegando de manera consecutiva. Y Spencer ha sido una pieza clave.
La evolución
El cambio que este jugador ha experimentado respecto a sus cuatro primeros años en la NBA es digno de alabar. Sus dos primeras temporadas en Detroit son para olvidar, jugando un promedio de 13,4 minutos por partidos en ambas anotando sólo 4,3 y 4,5 puntos de 5 lanzamientos a canasta por partido, eso sumado a su pésimo porcentaje en triples(18% y 10%) y a que los problemas físicos le habían mermado poder jugar partidos de manera consecutiva(disputó 46 partidos contando las dos temporadas) hacían presagiar una carrera destinada a los banquillos y a disfrutar de los minutos de la basura.
Pero entonces llegó a Brooklyn en Verano del año 2016 y todo empezó a cambiar para mejor. Su tiempo en cancha aumentó en 10 minutos por partido y, aunque de nuevo, una lesión apareció fue capaz de sobreponerse para llegar hasta los 59 juegos. Finalmente en la temporada 16-17, sin ningún contratiempo, fue capaz de dar el nivel que se esperaba en Nets. Se fue hasta los 13 puntos por partido 3,2 rebotes y 6,6 asistencias, todos máximos de carrera en ese instante.
También mejoró en la efectividad de los tiros, seleccionando mejor cuando lanzar y conociéndose mejor, ejecutando las cosas que sabe hacer y sin intentar lo que no puede. Sus porcentajes se fueron hasta un 45% en tiros de campo y un 37% en triples. Pero, no contento con eso, este año ha vuelto a explotar, y de qué manera. Ha mejorado a tal punto que hay mucha gente que le pone en la discusión para el MIP (Most Improved Player o Jugador Más Mejorado).
Disputando 28 minutos por encuentro este año anota 17 puntos por partido, 2,8 rebotes y 5,4 asistencias, siendo también él que mas está mirando al aro y con mejores porcentajes, tanto de tiros de campo, como triples, siendo figura clave en estos resucitados Nets, donde ya no es casualidad ganar y donde vuelven a tener esperanzas de llegar a los playoffs.
Sin ir más lejos hace una semana visitaron la cancha de los Rockets, visitaban al equipo que el año pasado consiguió el mejor récord en temporada regular de toda la liga, con un tío que está haciendo la mejor temporada a nivel individual desde un tal Kobe Bryant en 2006. Pues bien, aún con ese tipo llamado James Harden anotando 58 puntos y la afición en su contra lograron llevarse la victoria a Nueva York. Gracias a Spencer. Dinwiddie acabó con 33 puntos y 10 asistencias saliendo desde el banquillo y anotó un 2+1 a falta de unos pocos segundos para el final del partido, que se había prolongado cinco minutos más a causa de la prórroga, que sentenció a Houston y selló el triunfo para su equipo. Ha pasado del anonimato al estrellato.
https://www.youtube.com/watch?v=dH1g-0ZtHRU
La clave del cambio
Pero, como ya sabréis, nada en esta vida sucede por casualidad. Tampoco las mejoras estadísticas de Dinwiddie. Durante el Verano en el que fue traspasado a Brooklyn decidió que era el momento de dejar de lamentarse y tirar hacia delante. Contrató un dietista y un entrenador personal para dejar de tener esos problemas físicos que tantos problemas le causaron. Y todos sus esfuerzos se vieron recompensados pues ya no quedan ni séquelas de todo aquello.
Comenzó a hacer yoga para mejorar la flexibilidad de sus músculos, lo cual reduce la probabilidad de lesión o distensión del mismo. Además empezó a comer más sano y durante un tiempo solo consumía como bebida o agua o zumos naturales. Completamente prohibidas las bebidas energéticas y, por supuesto, el alcohol. Tras esto, no ha vuelto a tener problemas serios con los abductores ni con los gemelos, que era de donde más padecía dolores. Y así hasta hoy, donde podemos afirmar con total franqueza, que ya es toda una estrella de la NBA.
Imagen de portada vía: NBA