Los Nets asustan en el debut de la temporada
Volvía Kyrie Irving después de meses, y más importante, lo hacían Kevin Durant y Stephen Curry tras lo que nos ha parecido a todos una eternidad. El primer partido oficial tras la burbuja que vivimos sorprendidos hace meses lo ofrecían Warriors y Nets en Brooklyn. El morbo estaba en la vuelta de los otrora compañeros Durant y Curry. Sin Draymond, sin Klay (este no estará en todo el curso) y con un Wiseman con apenas entrenamientos tras pasar el coronavirus. Sin embargo, cuando el base de los Warriors está en la cancha todo puede pasar. Y los primeros puntos de la temporada llegaron de su bendita muñeca, aunque de la línea de tiros libres. A partir de ahí los Nets hicieron patente la diferencia que había en la cancha.
Durant e Irving empezaron el encuentro revolucionados, en el mejor sentido que pueda ofrecer esa palabra. Puntos, puntos y más puntos. Corriendo de forma eficiente y pasando por encima de sus rivales en casi todas las facetas del juego. Durant, sin miedo; lo teníamos más nosotros cada vez que caía al suelo o saltaba a realizar un mate. Tras más de un año fuera de las canchas, apenas se le notó resentido. Su equipo anotó 40 puntos en el primer cuarto y la sensación fue que solo estaban empezando. La diferencia de 15 puntos que crearon en el primer periodo no hizo sino crecer y en la segunda parte las estrellas pudieron sentarse y disfrutar de buenas charlas.
La rotación de los Nets, capitaneada por una estrella en ciernes como Caris LeVert, augura buenos tiempos futuros para la franquicia del Este. El partido acabó 99-125 para los Nets; los Warriors dejaron malas sensaciones pero es solo un partido. Dejemos que este proyecto avance, quien lo merece más que ellos. La relación de Durant e Irving será clave para el devenir del equipo. De momento, empiezan con 22 y 26 puntos respectivamente, y sin jugar el último cuarto. Suficiente para atropellar a Golden State.
Lo MEJOR de DURANT e IRVING en la victoria de NETS ante Warriors pic.twitter.com/ciMB5PVh5W
— NBA Spain (@NBAspain) December 23, 2020
En el segundo y último partido de la noche se enfrentaban los Lakers, actuales campeones de la NBA, contra los Clippers. Estos últimos, tras el fracaso en la burbuja, saben que tienen que dar un paso adelante este curso. Y así quisieron empezar el primer partido. Entre que los Lakers salieron displicentes a la cancha, de resaca tras el triunfo y a sabiendas de que un primer partido no marca nada (ya perdieron el año pasado en el inicio de la temporada contra Clippers) y que los de Lue querían resarcirse, en el primer cuarto ya iban +21 en el marcador. Ibaka fue el mejor para LAC en el primer cuarto mientras que Schroeder, más por lucha que por acierto, lo fue para LAL.
Sin embargo, los Clippers hicieron lo que mejor se les dio en la burbuja: perder la ventaja en el marcador en pocos minutos. Lakers empezó a defender un poco en el segundo cuarto y sin darnos cuenta ya estaban solo 2 puntos por detrás. Cosas de Clippers. Ni Anthony Davis ni LeBron James tenían muchas ganas de jugar el partido aunque este último dio más la cara. El partido tuvo historia hasta que Paul George quiso. Un final de tercer cuarto y un último periodo estelar del que recientemente ha firmado el contrato de su carrera repitieron la historia del año pasado. Terminó con 33 puntos, 26 de ellos los anotó en el segundo tiempo. Los Clippers comienzan adelantándose en el enfrentamiento angelino (116-109). Veremos como acaba esto.
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