Detroit Pistons y su arranque sin Blake Griffin
En ‘La ciudad del motor’ vienen de una season en la que fueron capaces de aspirar a entrar en los playoffs. Una cosa que acabaron consumando. La debilitada Conferencia Este les había sido más que asequible con una estrella tirando del carro. El baloncesto en Detroit pasó en el gran porcentaje del uso por las manos de su jugador franquicia, siendo quien más genere y quien más finalice. El respaldo del pívot y el base, entre otros complementos, ayudó, pero sin duda la aparición en pos-temporada tiene nombre y apellidos.
El ala-pívot, desde que llegó de Los Angeles Clippers ha sido un poco olvidado al salir de la órbita de mercados grandes o contenders. En un páramo, donde las expectativas se acaban desde que tienen enfrente a un rival como Milwaukee Bucks a siete partidos delante. El contexto no es ni mucho menos el idóneo para que siga teniendo focos encima, aunque no haya dejado de merecerlos. La evolución en su juego ha sido notable, llegando a desarrollar muchos aspectos que no se apreciaban en sus inicios de trayectoria.
La importancia que tiene Griffin en esta franquicia se ha hecho más grande en cada momento que pasa, y con la incorporación de Derrick Rose como mayor atractivo del verano no se espera a priori que baje su dependencia. Es una situación complicada, y más teniendo en cuenta que Griffin arranca el 2019/20 siendo baja en todo el mes de octubre. Esto significa que no actuará contra Indiana Pacers (tampoco viaja Sekou Doumbouya), Atlanta Hawks, Philadelphia 76ers, otra vez contra los de Indianapolis y contra los Toronto Raptors. Un calendario muy complicado y donde pueden acumular un registro de derrotas bastante difícil de invertir luego.
Una vez pasados estos encuentros, en donde el proyecto emergente de Georgia es el rival más asequible, es cuando se volverá a realizar un examen a Blake para ver si se encuentra disponible para volver a las canchas. En esta semana inaugural, y parte de la siguiente como mínimo, los Pistons van a tener que hacer fluir el balón mucho mejor de lo visto en el 2018/19. El último recuerdo que tenemos en competición oficial de este equipo es con Griffin promediando 5,4 asistencias, lo que le hacía ser el líder en este registro de la plantilla.
Es un gran reto el que tiene Dwayne Casey para arrancar el curso, y sin duda podrá marcar el devenir. Una acumulación de derrotas muy grande, salvo remontadas estelares como Houston Rockets en la season pasada, es algo que les puede lastrar mucho y que tendrán que intentar evitar de cualquier manera. Markieff Morris es el principal recambio de la estrella, y tendrá una responsabilidad muy grande en este comienzo.
Sin embargo han tenido un gran comienzo en este primer partido de temporada, luego de haberles ganado 119-110 a los Indiana Pacers. El juego colectivo y el gran aporte de todos ha sido fundamental y han dejado casi de lado el recuerdo de Blake. Con un Andre Drummond a su ritmo, con 32 puntos y 23 rebotes, fue el máximo en ambas facetas del partido.
Por otro lado, destacar la gran pareja que han hecho hoy desde la suplencia Derrick Rose y Luke Kennard, con 18 y 30 puntos respectivamente. Siendo así el máximo de su carrera en un partido oficial para el escolta. Además de que el juego de balón fue algo muy positivo y ayudó mucho a la victoria, en este aspecto nombrando nuevamente a Rose, con 9 hoy, a Reggie Jackson y a Bruce Bowen con 5 y 4 para cada uno.
En este primer partido han dejado muy buenas sensaciones, pero esto recién es el primer partido y falta muchísimo por ver y acomodar. Sin embargo, los aficionados ya pueden ir pidiendo para que cada partido se lo tomen con esta seriedad y haya tan buen baloncesto para ver en la «ciudad del motor».
