New York, New York
Después de unos terribles años para el baloncesto neoyorquino, tanto la franquicia de Manhattan como la de Brooklyn, Knicks y Nets, ven la luz al final del túnel. Unas pésimas gestiones en los despachos y varias decepciones en las canchas han provocado que la ciudad con más glamour de los Estados Unidos no vea a uno de sus equipos en las finales de la NBA desde hace más de 15 años, cuando las alcanzaron (y perdieron) dos veces consecutivas los Nets de Jason Kidd y Kenyon Martin.
La agencia libre de este año 2019 es muy prometedora para estos dos equipos, que han conseguido superar sus respectivos baches y actualmente cuentan con dos de las plantillas más jóvenes y preparadas de la liga y con espacio salarial suficiente para incorporar hasta dos piezas de élite que lideren a los young cores y los lleven a lo más alto de la NBA. Sin embargo, los suculentos agentes libres de este verano todavía no se han comprometido con ninguno de los dos equipos, y algunos de los más solicitados, como Kawhi Leonard o Jimmy Butler, parecen estar bastante lejos de Gotham City.
A continuación, haremos un repaso por la situación de ambas plantillas, las ventajas y dificultades que pueden encontrar los agentes libres que decidan acudir a la llamada de la Gran Manzana y cuáles son los objetivos de ambas franquicias de cara a la agencia libre y el futuro próximo.
Empezamos por los Brooklyn Nets, que desde la temporada pasada están empezando a levantar la cabeza después del desastroso traspaso que llevaron a cabo en la operación con Boston Celtics para traer a Garnett y Pierce en 2014. El conocido como “peor traspaso de la historia” ya es agua pasada, y los Nets han ofrecido un auténtico espectáculo esta temporada sobre la pista del Barclays Center. Después de haber competido con todos en temporada regular, regalándonos auténticos partidazos, forzando prórrogas imposibles y obteniendo el sexto puesto de la Conferencia Este, encaran la agencia libre con muchísimo dinero para gastar, pero grandes incógnitas en la plantilla.
La primera y más importante es el futuro de su estrella, D’Angelo Russell. Los Nets parecen muy interesados en adquirir a Kyrie Irving, y eso le cerraría la puerta al joven exterior. Sin embargo, Russell es agente libre restringido, y los Nets podrían retenerlo si quisieran, seguramente igualando un contrato máximo que le pueda ofrecer cualquier otra franquicia de la liga. Sea como fuere, parece claro que los de Brooklyn tendrán un base All-Star en su roster de la próxima temporada. Teniendo en cuenta que Joe Harris,
Caris LeVert y Jarrett Allen alcanzaron este año su mejor momento de forma, es lógico que busquen un base para complementarlos y que pueda aumentar el impacto de Dinwiddie desde el banco. Uno de los grandes fuertes de los Nets es que su núcleo duro, sobre el que están construyendo a excepción de DLo, continuará el año que viene.
En la parte negativa, saldrán a la agencia libre nombres que han dado rendimiento en Brooklyn como Rondae Hollis-Jefferson o Ed Davis, lo que hace pensar que deberían buscar un interior con el espacio para un contrato máximo que les resta. Sus mejores opciones pueden ser Al Horford, Tobias Harris o Julius Randle. Los Nets han conseguido tanto espacio salarial debido a la liberación de contratos que decidieron absorber la temporada pasada como los de Dwight Howard o Kenneth Faried. Además, han conseguido soltar a Allen Crabbe y traer desde Atlanta a Taurean Prince, otro joven con mucho potencial. Aun así, siguen pagando la stretch provision, es decir, el restante de un contrato en vigor que se alarga en los años aunque el jugador se marche a otro equipo o se retire, de Deron Williams.
Por último, se incorporan al equipo los novatos del presente draft: Nic Claxton y Jaylen Hands. En el caso del primero, perfecto movimiento de Nets, ya que incorporan a un hombre grande que puede paliar la necesidad de interiores en la plantilla en formación. La elección de segunda ronda, Hands, es un base de UCLA con una velocidad de juego vertiginosa, que encaja perfectamente con el ritmo rápido que han practicado los Nets este año. Si consiguen atraer a los agentes libres adecuados, serán un equipo muy a tener en cuenta.
El caso de los New York Knicks, aunque por motivos distintos, desemboca en una situación bastante similar a la de sus vecinos. Los de Manhattan, no pisan la post-temporada desde hace ya 6 años. El rendimiento de su estrella, Carmelo Anthony, fue descendiendo poco a poco hasta su crítica situación actual, y el reemplazo que encontraron en “el unicornio” letón Kristaps Porzingis se vio frustrado por una durísima lesión del ligamento cruzado que todavía no le ha permitido jugar después de hace ya casi un año y medio. Este cúmulo de desgracias ha hecho que la franquicia haya pasado por uno de sus peores momentos en la historia, pero esta temporada han vuelto a encontrar algo con lo que ilusionarse.
Los jugadores jóvenes vuelven a dar brillo a esta franquicia, que ha jugado muchos minutos de la temporada 2018-19 con quintetos sin más de 2 años de experiencia en la liga. Frank Ntilikina, Allonzo Trier, Damian Dotson, Kevin Knox o Mitchell Robinson son algunos de los nombres que han devuelto la esperanza a los “Knickerbockers”. Además, el traspaso de Porzingis hacia los Dallas Mavericks permitió encontrar a los de Nueva York otras piezas de gran valor que han encajado bien en el equipo como Dennis Smith Jr. Cabe destacar, y es lo más positivo de cara a la agencia libre y la próxima temporada, que todos los jugadores aquí mencionados seguirán, salvo sorpresa, en el equipo.
En contrapartida, pero menos grave, deberán despedir rumbo a la agencia libre a piezas como Emmanuel Mudiay, Mario Hezonja, Noah Vonleh o DeAndre Jordan. Sin duda, los nombres que se quedan pesan más que los que se marchan. Además, tras librarse de los contratos de Wesley Matthews, Enes Kanter y Ron Baker dispondrán, aunque sigan pagando el buyout de Joakim Noah, de espacio para fichar a dos jugadores con contrato máximo. Esto puede resultar, como en el caso de los Nets, en un equipo temible. El nombre que más suena en la Gran Manzana es el de Kevin Durant, que podría tener algo apalabrado con los Knicks tras haber rechazado, con el aquiles roto, una opción de jugador con los Golden State Warriors por más de 30 millones de dólares.
Además, viendo los jugadores con los que cuentan para la próxima campaña, les interesaría intentar fichar, como a los Nets, a un jugador de pintura. Tal vez podrían echar el resto por DeMarcus Cousins, intentar repescar a DeAndre Jordan o incluso preguntar por Brook Lopez o Nikola Vucevic. Pero más allá de los jugadores a los que puedan echar el guante durante el verano, tienen ya vistiendo la camiseta con el número 9 a una de las grandes ilusiones de la ciudad: RJ Barrett. La estrella universitaria salida de Duke fue elegida en el número 3 del draft, tras las obvias elecciones de Zion Williamson y Ja Morant. Barrett tiene pinta de empezar a rendir desde el primer minuto, y su ilusión por ser un “Knick” y su carisma han enamorado a la ciudad. Y no conformes con eso, los de naranja han conseguido también hacerse con Ignas “Iggy” Brazdeikis, un alero con gran determinación y agresividad que puede ofrecer grandes minutos desde el banco y dar descanso a la estrella que seguro conseguirán en esa posición.
Después de ahondar en las perspectivas de ambos equipos, la rivalidad está de nuevo servida en la Gran Manzana. Seguro que la temporada que viene disfrutaremos de ambos equipos como hace años que no lo hacíamos, y nos encanta que los dioses del baloncesto hayan vuelto a bendecir a una ciudad como Nueva York. ¿Y tú, a quién elegirías?