Además de todo lo complejo y sin precedentes que se vive esta temporada en la WNBA ha habido un factor que ha hecho más especial la competición. La llegada de una jugadora con un gran nivel de expectación detrás ha ayudado a que más gente se acerque a seguir la liga.
La mala suerte ha sido que Sabrina Ionescu no tuvo prácticamente tiempo de demostrar su valía entre profesionales debido a una lesión en su tobillo que ha hecho que salten las alarmas pudiendo llegar a perderse toda la temporada.
Aunque dentro de lo malo no es todo tan malo, dado que Ionescu no tendrá que operarse y solamente necesita pasar por una buena rehabilitación para poder regresar a las canchas con sus nuevas compañeras de las New York Liberty.
No es seguro que este 2020 en la burbuja se pueda volver a ver a Sabrina jugar con las neoyorquinas. La franquicia ha dicho que seguirán actualizando la situación de su futura estrella acorde vaya evolucionando ese esguince que no ha dejado disfrutar de su año rookie en la WNBA.
En su poco tiempo en la IMG Academy en Bradenton tuvo unos promedios de 18.3 puntos, 4.7 rebotes y 4 asistencias, siendo una pequeña muestra de lo que puede hacer habiendo metido 33 puntos, 7 rebotes y 7 asistencias contra las Dallas Wings en una derrota.
#EntraEnLaZona
Si te gusta leer y escuchar podcasts sobre baloncesto te recomendamos que nos sigas en nuestro Patreon y allí encontrarás contenido exclusivo que no está en la web. ¡En patreon.com/elperimetro lo encontrarás!