La escolta senior de la universidad de Baylor tuvo un incidente en una práctica que la dejó sin posibilidades de jugar con su equipo hasta esta semana. Aunque eso es lo de menos ya que por un breve tiempo no podía caminar.
38 días después de sufrir una lesión en la médula espinal en un entrenamiento, que la dejó sin sensibilidad ni capacidad de movimiento en las piernas, DiDi Richards ha regresado a las pistas.
Y no solamente volvió a jugar, sino que pudo estar 30 minutos en el partido contra South Florida. Por suerte todo ha quedado en un susto para ella.
«Fue un día muy emotivo. Fue emocionante volver a jugar un juego, porque yo no he jugado desde marzo. Siempre ha sido mi papel traer energía a la cancha, y creo que eso es lo que necesitábamos» dijo DiDi después del partido.
La joven guard también señaló que era el cumpleaños de su abuelo, quien murió dos meses antes de que Baylor ganara el campeonato nacional en 2019.
Senior guard DiDi Richards returning to the court tonight!
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— NCAA Women’s Basketball (@ncaawbb) December 2, 2020
DiDi en su última temporada viene de hacer 8.2 puntos y 5.7 asistencias siendo una jugadora muy importante en el equipo. Por lo que estar alejada de las canchas ha tenido que ser muy duro para ella.
Richards dijo que comenzó a caminar sin necesidad de ayudar hace un par de semanas nada más, que fue un proceso lento y no algo de un momento para otro. «Más recientemente, todo encajó. Y luego dije: Bueno, si puedes caminar, puedes correr, y si puedes correr, puedes driblear. Empecé a probar cosas nuevas ya esforzarme un poco más» dijo DiDi sobre el tiempo de recuperación.
A lo que Richards añadió: «Nunca pensé que no iba a jugar esta temporada. Sólo sabía que de alguna manera… De alguna manera me iba a bajar de ese andador. No sabía qué tan rápido iba a ser«.
No fue hasta este último sábado que pudo volver a hacer un entrenamiento completo. Y esto fue lo que dijo su entrenadora, Kim Mulkey:
«Cada día, había hitos más importantes que alcanzó. Los médicos seguían diciendo que ella eventualmente regresaría, pero yo no lo sabía al principio. Lo que presencié durante varios días e incluso semanas me hizo pensar. Lo único que me importaba era que pudiera caminar de nuevo, vivir una vida normal y ser feliz«.
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