La situación de muchas jugadoras profesionales se encuentra muy lejos del respaldo económico y mediático que merecen. Por lo que en categorías de formación se pueden ver también desventajas. Sabrina Ionescu sabe lo que es eso, habiendo tenido que luchar en la escuela por poder jugar a baloncesto.
Desde la directiva no querían moverse en busca de hacer un equipo femenino, y tuvo que ser la propia Ionescu quien reuniera al resto de jugadoras. Una de las primeras muestras de la actitud y personalidad tan especial que tiene Sabrina. Algo que respalda todo el hype que tiene detrás y que hace a mucha gente apoyarla. Un escenario que podría ser una presión, pero para ella es algo positivo.
https://elperimetro.es/2020/01/17/sabrina-ionescu-futura-estrella-del-baloncesto/
Por suerte para ella ha sabido canalizar esa carga de tantos ojos mirando. «Siempre he usado eso como motivación y siempre he tratado de no demostrar que están equivocados«, dijo Ionescu en High Post Hoops.
Una vez llegada a ser profesional, Sabrina tiene una gran oportunidad para dar un golpe encima de la mesa en nombre del baloncesto femenino. Tiene mucha gente esperando que lo haga y ella confía mucho en sus posibilidades. «Solo trato de probar que las personas que sí creyeron en mí tienen razón«, son palabras suyas que lo confirman.
«Para todas las jugadoras que se enfrentan a algún tipo de discriminación, por decir, ya sabes, en función de su género, les diría que lo usen como impulso y lo usen para hacer que esas personas se vean mal porque son muy desconsideradas y realmente no entienden el poder de las mujeres«. – Sabrina Ionescu
Sabrina puede convertirse en una gran inspiración para las nuevas generaciones. Tiene el talento y el carisma necesarios para conseguirlo, siendo un nuevo impulso para el baloncesto femenino. Un poco acercando un escenario en el que jugadoras como Paige Bueckers no sorprendan tanto por brillar desde niñas.
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