Pasan las jornadas en Turquía y los equipos ya van asentándose en las posiciones de la clasificación. El Fenerbahçe sigue en cabeza sin conocer la derrota y el Galatasaray le persigue. Como era de esperar. Las sorpresa es el otro equipo que también sigue la estela del primer puesto.
El Nesibe Aydin se ha mantenido con un registro de 8 – 1 una vez completada la novena jornada, siendo ya de forma sólida un equipo de la parte superior de la tabla.
No es casualidad que en 9 partidos solamente hayan perdido contra el Fenerbahçe. El proyecto del Nesibe ha sido un gran acierto poniendo a Ruthy Hebard como la principal estrella de su plantilla. Es una jugadora que en la WNBA no tuvo la oportunidad de tener un rol importante y en la liga turca está demostrando merecerlo.
En las Chicago Sky fue una jugadora de rotación, debido a su estatus de rookie, pero a partir de esta explosión en la KBLS se hace difícil imaginarla sin papel protagonista en la rotación de James Wade.
Durante la octava victoria de su equipo, Hebard hizo 32 puntos, 20 rebotes y 3 asistencias. Un total de 46 de valoración que siguen manteniéndola como una de las principales caras de Turquía en esta temporada siendo la primera vez que juega en el extranjero.
Acaba de salir de la universidad prácticamente y ya está haciendo 22.2 puntos, 13.4 rebotes, 1.2 robos y 28.6 de valoración de promedio. Unos números de locura. Es una lástima que su equipo no tenga plaza en competiciones europeas esta temporada.
Esto dijo Kelly Graves, entrenador de Oregon, en una entrevista con El Perímetro:
«Ruthy, creo que está haciendo un gran trabajo. Está cumpliendo su rol, juega en uno de los mejores equipos de la liga y creo que continuará mejorando según vaya ganando fuerza y experiencia. Está jugando detrás de jugadoras muy buenas, y está jugando con una jugadora cercana y querida para mí, Courtney Vandersloot, a la que entrené durante cuatro años y que es la mejor base del mundo. Así que Ruthy ahora es la típica rookie, desempeñando un buen papel en un gran equipo«.
El único partido en el que Ruthy estuvo más de 30 minutos en pista en la WNBA fue el único en el que llegó a los dobles dígitos en lanzamientos. Fue contra Dallas Wings el 11 de septiembre y terminó la noche con 22 puntos y un 9 de 12 en tiros de campo además de 8 rebotes y 2 asistencias.
Ha habido partidos que salga de titular pero luego no llegue a 10 minutos en la pista sin hacerlo mal, teniendo poco sentido su rol en el equipo en esos momentos. No es una jugadora que acostumbre a acumular muchas faltas, por lo que sido realmente raro el uso de Hebard que han tenido en la rotación de Chicago tramos de la temporada.
Todavía es una jugadora muy joven, pero puede aportar muchísimo en un equipo e incluso llegar a liderarlo como está demostrando con el Nesibe. Sin dudas esta temporada overseas le está sirviendo para consolidarse mucho más rápido como una jugadora con claro potencial para convertirse en una All-Star en algún momento de su carrera.
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