La estrella de la WNBA ha dejado su carrera deportiva de lado para invertir su tiempo en asuntos que para ella son mayores. Busca tener un impacto positivo en la comunidad de los Estados Unidos y para eso necesitaba centrarse. Compaginar se una jugadora de la élite y querer cambiar el mundo no es sencillo. Ya Diana Taurasi ha dejado claro que para estar en ese nivel tienes que dejar tu vida en ello.
Por todo su trabajo, Maya Moore ha sido nominada finalista para el Muhammad Ali Sports Humanitarian Award de la ESPN junto a Kevin Love y a los Sacramento Kings como entidad.
Moore se ha dedicado este tiempo a intentar arreglar un caso que ella ha visto injusta sobre Jonathan Irons, un menor de edad en 1993 que había sido condenado a 50 años en la cárcel. Su historia es de dedicación desinteresada, fe y búsqueda de la verdad, y como ella ha dicho, siempre en nombre de Dios.
Maya ya sabe lo que es ganar en la cancha, y ahora quiere demostrar que puede vencer a un sistema de justicia penal que ve injusto. El objetivo que tiene es conseguir dar voz a quien no la tiene, acompañando su labor con charlas por escuelas.
Esto y mucho más ha hecho que el 21 de junio, Moore esté en la gala de este premio como una de las candidatas a llevarse los honores. Además de tener 25.000 dólares disponibles para donar a una organización benéfica por ser finalista. El premio busca liderazgo continúo e impacto en la sociedad, por lo que Maya se ha ganado estar ahí.
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