Recientemente se anunciaba el fichaje de Iris Junio por el Spar Gran Canaria para la temporada 2023-2024. Sin duda, una de las mejores noticias para el baloncesto femenino español. Tras cinco años de aprendizaje en Estados Unidos, la base canaria vuelve a casa, donde hizo historia al debutar con tan solo 14 años, 6 meses y 17 días en la máxima categoría del baloncesto español.
Sin embargo, el recorrido de Iris Junio para llegar a donde está ahora no ha sido nada fácil. Varias lesiones de rodilla, hombro y tobillo le impidieron seguir el camino estratosférico que estaba siguiendo. A parte, también sufrió ansiedad y depresión, y así lo contó en un vídeo relatando su experiencia. Ahora, tras haber superado todos esos baches que se le fueron poniendo en el camino, Iris viene con más ganas e ilusión que nunca.
Vamos a empezar esta entrevista, no sin antes agradecer a Iris Junio su predisposición y el valor de poner en alza la salud mental en el deporte. A continuación, les dejamos la entrevista realizada a la jugadora de la Liga Femenina Endesa:
El Perímetro: ¡Hola, Iris! En primer lugar, me gustaría darte las gracias por acceder a realizar esta entrevista para “El Perímetro”. Recientemente anunciaste que la temporada que viene jugaras al baloncesto profesional. ¿Te costó mucho tomar esta decisión?
Iris Junio: Sinceramente, la decisión de seguir jugando no me costó. Tuve un tiempo de descanso que me sirvió para poder desconectar y decidir qué era realmente lo que quería hacer. El simple hecho de pensar en seguir jugando me hacía ilusión, por lo que apenas dudé en tomar esta decisión.
EP: La mayoría de jugadoras españolas que pasan su etapa universitaria en Estados Unidos vuelven a jugar en España. En tu caso, has optado por fichar por Gran Canaria. ¿Qué te ha motivado para decidirte por este equipo?
I: El Spar Gran Canaria es mi club desde que empecé a jugar al baloncesto, para mi es como mi casa. Además, Begoña y Domingo me conocen muy bien y me han enseñado todo lo que sé, por lo que sin lugar a duda sé que voy a estar bien. Aparte, el hecho de haber estado alejada de mi familia durante 5 años en mi etapa universitaria en Estados Unidos ha influido en tomar esta decisión. Sin duda, volver a vestir de amarillo, jugar con mis compañeras y para el club que me vio crecer es algo que me hace muchísima ilusión.
EP: Echando la vista atrás, durante tu carrera deportiva has pasado por varios momentos duros, especialmente con las lesiones. Este año en la Liga Endesa son varias las jugadoras que han caído lesionadas, sobre todo del ligamento cruzado de la rodilla. Tú, que has pasado varias veces por esta situación, ¿qué consejo le darías a las jugadoras para afrontar mejor el periodo de recuperación?
I: Cualquier lesión baja los ánimos y es algo muy duro de afrontar, especialmente las lesiones de rodilla, que suelen ser muy complejas y de las que más tiempo se tarda en recuperar. Es normal que al volver a la cancha se pueda ir con inseguridad o poca confianza. Mi consejo es tomárselo todo con más calma, hacer caso a las pautas de los médicos y fisios, y cuidar la alimentación.
EP: Aparte de las lesiones físicas, también hay otro tipo de lesiones como son las enfermedades mentales que tienden a esconderse debido a los estereotipos de la sociedad. Son un gran tabú que la sociedad ha creado y la realidad es que la mayoría de personas tiene un concepto erróneo acerca de estas debido a la falta de conocimientos. En tu segundo año de universidad pasaste por ansiedad y depresión, en ese momento, ¿cómo te sentías?
I: Mi segundo año en la universidad fue bastante duro. Además de haber pasado por lesiones físicas, me empecé a encontrar en un agujero negro del cual no sabía salir. Al final me acabaron diagnosticando ansiedad y depresión. Fue una etapa bastante dura, pero gracias a mi familia, entrenadores americanos, compañeras de equipo y a mi gato pude salir de la depresión.
EP: Parece que poco a poco hay más concienciación acerca de este tema, pero, ¿crees que sigue habiendo tabú en el mundo del deporte acerca de la salud mental?
I: Creo que, a día de hoy, todavía sigue siendo un tema tabú. Hay muchas personas que lo sufren y no lo cuenta por el qué dirán o por el miedo a que cambie su perspectiva respecto a ellos. Es bastante difícil contar que tienes depresión y cómo te sientes a personas que nunca la han sufrido porque es difícil de entender. La salud mental es tan importante como la salud física, contarlo y pedir ayuda en cualquiera de los dos casos nunca debería de ser juzgado sino apoyado.
EP: Son muy pocos los equipos que cuentan con un psicólogo deportivo en sus filas. ¿A qué crees que se debe esto? En tu caso, ¿el ir a terapia te ha ayudado a seguir jugando a baloncesto?
I: Realmente creo que es debido a que el presupuesto de muchos equipos no llega para un psicólogo y menos en los equipos femeninos. Sin duda la figura de un psicólogo deportivo en los equipos sería de gran ayuda. Definitivamente, en mi caso el ir a terapia me da paz mental, otra perspectiva de vida y fe para afrontar diversas situaciones, por lo que indudablemente me ha ayudado a seguir con el deporte y con la vida en general.
EP: ¿Cómo te encuentras a nivel deportivo?
I: A nivel deportivo me encuentro bien, con muchísimas ganas de empezar la liga y, sobre todo, de volver a disfrutar y sonreír en la cancha. Sé lo tengo que hacer para estar en mi mejor momento tanto físico como mental, por lo que si yo hago mi parte todo lo demás vendrá sólo.
EP: Por último, ¿qué consejos le darías a tu yo del pasado cuando pasabas por momentos difíciles?
I: El consejo que le daría a la Iris del pasado sería tomarse las cosas con más calma, estudiar cada situación para así tomar la mejor decisión posible y pedir ayuda cuando la necesite.
Imágenes vía Iris Junio en Instagram