Ensino Lugo terminó la temporada con un balance de victoria y derrotas de 13-17, lo que dejí al club en el puesto 11º de la clasificación.
El equipo gallego encaraba la temporada 22/23 con muchas caras nuevas y con el objetivo de no pasar apuros para salvarse pero sin perder de vista, aunque fuera de reojo, la 8ª plaza.
Si bien se acabaron salvando con relativa comodidad, el de no sufrir no fue precisamente el camino a seguir por el Ensino ya que la temporada fue compleja y con altibajos dignos de guion de película de suspense.
Las de Antonio Pernas tenían por delante un proyecto ilusionante que arrancaba nada más y nada menos que con 3 partidos durísimos como eran Girona, Zaragoza y Avenida, que saldaron con un más que meritorio 1-2, venciendo en casa ante Avenida y haciendo sufrir al Zaragoza lejos de Lugo. El equipo dejaba buenas las sensaciones y los resultados acompañaban de inicio.
Las primeras 10 jornadas dejaban un balance de 5-5 y situaban a las gallegas en el 8º puesto en la clasificación, habiendo jugado ya contra Zaragoza, Valencia, Avenida y Girona, lo que suponía una inyección de moral tremenda para las aspiraciones del equipo.
La temporada prometía, la dinámica del equipo era buena era buena y la clasificación ilusionante, pero entonces llegó la fatídica jornada 11 en Gran Canaria con la gravísima lesión de Blanca Millán. La jugadora con más peso en el equipo hasta la fecha no iba a estar disponible en lo que restaba de temporada y eso no solo afectó al partido en cuestión si no que generó una resaca emocional desencadenante de una racha de 1 victoria y 7 derrotas, incluidas 6 consecutivas que dejan al equipo en una situación muy complicada tanto en la clasificación como anímicamente.
6-12 era el récord después de la jornada 18, mismo balance que Leganés, situado en puestos de descenso. Algo tenía que cambiar si no querían complicarse la salvación y las jugadoras y cuerpo técnico dieron un golpe encima de la mesa para entre todos cambiar la dinámica y conseguir que el juego alegre característico de las lucenses
volviese a aparecer y con él conseguir la tan ansiada salvación.
Un sprint final de 7 victorias y 5 derrotas en el último tramo de competición les permitió terminar la temporada tranquilas e incluso pelear por las últimas plazas de playoff, a un solo partido de distancia de las plazas que dan acceso a las eliminatorias por el título.
La valoración final de la temporada del Ensino Lugo es de notable.
Es cierto que el equipo pasó por momentos muy complicados en donde encadenaron varias derrotas consecutivas pero fueron capaces de reponerse a tiempo para terminar la temporada sin sufrir e incluso colocarse cerca de los puestos de playoff.
Imagen vía Ensino Lugo