Tuvo que ser a la tercera, como dicta el refrán, para que llegara la primera victoria en la WNBA de la número 1 del Draft de 2023, Aliyah Boston. Una de esas jugadoras generacionales que surgen una vez cada lustro, potente, eléctrica y con la vitola de dominadora en la NCAA los últimos cuatro años. Sus estadísticas, dobles-dobles, los 4 títulos de defensora del año y la innumerable colección de trofeos así lo atestiguan. Y en 3 partidos de liga regular hemos podido comprobar la dureza de la WNBA y lo que supone de cambio para las rookies cada año. En ese juego dinámico y duro, Aliyah ha sufrido. Tiros que antes entraban con facilidad, ahora son punteados, hay múltiples ayudas, contactos… incluso para una jugadora de ese nivel, se sufre.
Aun así, ha promediado en estos tres partidos 14.3 puntos, 6.7 rebotes y 1.3 asistencias, casi nada para una recién llegada.
🔥 Los primeros partidos de Aliyah Boston como profesional:
15 puntos y 60% en TC
15 puntos y 71.4% en TC
13 punros y 71.4% en TC🤯 Es la primera jugadora de la historia de la WNBA que debuta con 3 partidos de +10 puntos y +60% en tiros de campo.
(Vía @WBBTimeline) pic.twitter.com/bo6elMM9bN
— Manu Fresno (@Maanuf96) May 28, 2023
El pasado domingo se enfrentaba a Atlanta Dream, el equipo de la número 1 del Draft de 2022, Rhyne Howard, y que tan buenas sensaciones diera la temporada pasada, claramente de más a menos. Un equipo con mejores mimbres, más equilibrado que las Fever y de las que se espera un salto cualitativo este año. El partido fue igualado. Tanto que el final del partido se decidía por 3 puntos, en una actuación espectacular de Nalyssa Smith, compañera de Aliyah en el backcourt y número 2 del Draft de Howard.
Indiana llevaba 20 derrotas seguidas, igualando la racha más larga de la historia de la WNBA, pero consiguieron ponerle fin a ese paseo por el desierto.
Pero algo que nos ha gustado analizando los partidos es la clara apuesta por estas jóvenes. Indiana tiene que crecer y confiar en estos talentos que aparecen muy de cuando en cuando. Además, las dos últimas posesiones en estático de las Fever fueron para Aliyah y ella no dudó en jugarse esos tiros. Una rookie. En su tercer partido. Los falló. Sí. Pero hay que tener mucha confianza y sangre fría para decidir existiendo más opciones y que la jugadora acepte el reto. Seguro que llegan más oportunidades de mostrar el tremendo talento y competitividad de esta genial jugadora. Por el momento ha llegado la primera de muchas. Ojalá veamos pronto el potencial que atesora y disfrutemos de una personalidad arrolladora como la de Aliyah. El baloncesto necesita iconos y ella puede ser uno de los más grandes.
Imágenes vía Getty Images