En la Liga Femenina Endesa, al igual que en otras repartidas por el mundo, vemos como las jugadoras son profesionales de los pies a la cabeza pero la competición muchas veces no está a su altura.
Hay cosas de todo tipo, desde retransmisiones muy lejos del nivel que se merece la liga hasta errores en las estadísticas, pasando por falta de visibilidad.
Empecemos por lo complicado que es para mucha gente llegar a los partidos. Parece que es un producto que solo existe para la gente que ya lo conoce. Ver como se organiza una Supercopa o una Copa de la Reina sin carteles en esas ciudades para promocionar el evento es un ejemplo muy claro, y esta temporada pasó en ambos torneos. Y esto afecta a todos los niveles, desde que la repercusión de las jugadoras es menor hasta que muchas niñas no entrarán a este mundo tan bonito como lo es el baloncesto femenino.
Y claro, luego queda la opción de ver los partidos al otro lado de la pantalla. Pero no es lo mismo e incluso a veces no es fácil.
Cambios de hora casi repentinos, retransmisiones que no empiezan… Y cualquier cosa puede pasar por desgracia. En general queda mucho trabajo por hacer en este aspecto, y teniendo ya caminos para recorrer como el de la WNBA con el League Pass o la EuroLeague en YouTube no debería ser tan complicado. O incluso la NCAA que no es una liga profesional pero tiene un trato increíble en cuanto a televisiones.
Y pasamos a otra cosa que hay que cuidar mejor, no por el bien de la competición sino por las jugadoras. Con la tecnología que tenemos ahora mismo, que no se tenga un recuento exacto de las estadísticas es triste. Hay algunas que no han tenido miedo a hacer público en sus cuentas de redes sociales esto, y están en todo su derecho. Quizá una estrella europea o alguna que venga de Estados Unidos ni se entera, pero muchas jugadoras dependen de esas estadísticas para su futuro y posibles nuevos equipos. Puede parecer una tontería, pero una base que hace 5 asistencias por partido si tiene luego 3 en el acta le entrará menos por los ojos a un club donde no la conozcan mucho.
También tenemos la estadística de «los mates», donde podemos encontrar jugadoras que seguramente ni se han planteado hacer un mate en su vida. Son pequeñas cosas que se van sumando y te dan a entender que no se cuida el producto sino se hace todo lo más rápido posible y sin darle mucha importancia.
Y todo esto, entre otras cosas, a quien más perjudica es a las jugadoras. Son deportistas de élite que se dejan la piel en la cancha, no se merecen que luego ocurran este tipo de inconvenientes.
En España tenemos un nivel increíble entre las nacionales y es una liga muy atractiva para extranjeras, por lo que cuidando más el producto podríamos estar hablando de una competición de mucho éxito en todos los aspectos pero le falta bastante para eso desde el tema administrativo y la forma de llevar las cosas.
Ojalá con el paso de las temporadas ya no tengamos que ver estas cosas, pero ahora mismo es muy importante que se hable y no se deje pasar como si nada.
El baloncesto femenino por desgracia suele estar maltratado mediáticamente y si no se hace eco de los problemas que tiene estará siempre luchando contra viento y marea. Es cierto que poco a poco hay cosas que si mejoran, pero el camino todavía será muy largo. Por suerte, las jugadoras se esfuerzan al máximo por hacer de esta liga algo maravilloso y que le encanta a los que la conocen, pero si tuvieran más impulso sería otro nivel.
Por terminar y dejar una última comparación, en Estados Unidos la prensa normalmente trata a las jugadoras como las superheroínas que son y les hacen un marketing acorde a lo que merecen. Si preguntas, hay más gente que conoce a Diana Taurasi, Sue Bird o Candace Parker que a Indiana Fever, Dallas Wings o Atlanta Dream. Porque allí lo importante son las jugadoras y hacer que lleguen a la gente, mientras que aquí realmente ni se tiene claro cual es la prioridad por parte de mucha gente.
Imágenes vía: Zona Dos Tres
#EntraEnLaZona
Si te gusta nuestro contenido puedes apoyarlo suscribiéndote en Patreon, donde además tienes artículos y podcasts exclusivos. ¡En patreon.com/elperimetro lo encontrarás!