Toda victoria a estas alturas en el Eurobasket se tiene que trabajar y sufrir por lo que la de esta tarde en el Drive in Arena no iba a ser menos. España trabajó de lo lindo y a pesar de que el nivel esperado aún queda lejos, construir sobre las victorias siempre ayuda.
Comenzaba el encuentro con la España que hemos visto tantos minutos en este torneo, precipitada en ataque y tibia en defensa. Con Alba Torrrens al mando y con María Conde en el banquillo, la valenciana tomaba el control del ataque español en unos primeros cinco minutos que fueron un correcalles constante. Con Fasoula atada en corto por Laura Gil pero con Pavlopoulou inspirada las helenas sobevivieron al ritmo de su base.
No obstante la defensa apareció con el dúo Carrera-Gil aprentando atrás y con Cristina Ouviña liderando arriba se consiguieron las primeras diferencias en el marcador. Un parcial 15-9 puso a España por delante al descanso con la sensación de que a poco que se apretara la superioridad española debía solucionar el resto.
La reanudación dejó una nueva prueba de los momentos de relajación que tiene este equipo, permitiendo a Grecia acercarse en el marcador, haciendo que Spanou se buscara sus propios tiros sin oposición y con una Pavlopoulou que seguía superando la defensa Española con mucha facilidad. Solo los destellos de Carrera, Alba Torrens o Casas en ataque permitía a España seguir liderando pero con sensaciones muy regulares en el equipo.
Y en estas que llegó el ultimo cuarto, y al ritmo de Queralt la selección seguía por delante dejando mejores sensaciones anque lejos aún de lo esperado. Con Fasoula controlada y Spanou sin anotar, la ex de Estudiantes Aikaterina Sotiriou con ocho puntos seguidos mantenía las esperanzas de Grecia. Otro triple de Queralt Casas ponía la máxima diferencia de diez puntos para España a cuatro minutos de final con las de Miguel Méndez guardando a buen recaudo el botín hasta el pitido final.
Tres días de descanso tendrán ahora por delante antes de medirse al ganador del Alemania-Turquía/Eslovaquia. Días para recuperar sensaciones y sobretodo trabajar en esas desconexiones que comienzan a ser preocupantes y que han pemitido disfrutar de la calidad de esta selección muy a cuentagotas. Con la primera fase ya superada ahora toca sacar carácter y sobretodo el sello personal del grupo, hay tiempo de sobra para ello.
Imágenes: FEB y FIBA