Es cierto que la WNBA se suele considerar la mejor liga de baloncesto femenino del mundo, pero muchas veces entre las jugadoras el deporte es secundario. Hay otras cosas que requieren su atención y su implicación, siendo algo que las hace muy especiales.

Desde hace muchos años que se puede ver como las estrellas estadounidenses se involucran en política y asuntos sociales. El ejemplo más significativo es Maya Moore y sus Minnesota Lynx, pero pocas de las atletas que han pasado por la WNBA no se han metido en estos temas.

Durante la burbuja de 2020 en Bradenton se vio claro como toda la liga se unificó para trabajar en conjunto para dar voz a quienes no la tienen a raíz de su plataforma. Ellas saben que normalmente no tienen todo el apoyo en los medios que deberían, pero utilizan los focos que tienen sobre ellas para expandir sus mensajes.

Otros nombres propios que siguen en activo son Sue Bird, Angel McCoughtry, Nneka Ogwumike, Elizabeth Williams, Breanna Stewart, Emma Messeman y muchas otras que no dejan de poner su granito de arena para hacer de la sociedad americana un lugar mejor. Por suerte hay demasiados nombres propios para destacarlas a todas.

 

WNBA fines three teams and players for wearing Black Lives Matter t-shirts - CBSSports.com

 

En este escenario que se ha creado en la WNBA ha habido un caos interno con una copropietaria, Kelly Loeffler de las Atlanta Dream. Una política de Georgia que es afín a Donald Trump y en gran parte va en contra de los ideales de la liga y sus jugadoras.

Loeffler se ha mostrado totalmente en contra del movimiento Black Lives Matter, pensando que no se deberían meter ese tipo de ideologías en la liga. Pero claro, es algo que va implícito en la mayoría de las deportistas que forman parte de ella. La copropietaria envió una carta de queja a la comisionada Cathy Engelbert por este movimiento en julio, pero como se vio después no tuvo efecto.

Aunque tras una gran lucha las jugadoras ahora mismo celebran el hecho de que Loeffler, una republicana, perdiera su segunda vuelta en el Senado de los Estados Unidos en Georgia ante Raphael Warnock, un candidato demócrata que fue fuertemente respaldado por todas.

 

 

La estrella de Los Angeles Lakers, LeBron James, publicó un tweet en apoyo de la franquicia de la Atlanta el miércoles por la mañana temprano diciendo buscará como solucionar el problema que existe con el grupo de propietarios de las Dream.

Por ahora Loeffler no se ha pronunciado sobre vender su parte del equipo, pero realmente la presión de las jugadoras cada vez es mayor y llegará un punto en el que no le quede otro remedio.

Las jugadoras de la WNBA usaron camisetas de «Vote Warnock» este verano en la burbuja y se les ha atribuido el mérito de elevar al rival político de una de las dueñas de un equipo. Algo que no se ve todos los días y que de cara al público ha puesto en jaque a Loeffler.

Sin duda la conclusión que se saca de esto es que la WNBA es una liga muy corta en el tiempo en cuanto a lo deportivo, pero su partido más importante dura 365 días al año. Luchar contra las injusticias sociales y utilizar su plataforma para dar voz es algo que no permite descansar.

 

 

#EntraEnLaZona

 

Si te gusta leer y escuchar podcasts sobre baloncesto te recomendamos que nos sigas en nuestro Patreon y allí encontrarás contenido exclusivo que no está en la web. ¡En patreon.com/elperimetro lo encontrarás!

Por Manu Fresno

La magia ocurre sobre el parqué, solo soy encargado de narrarla.

Deja una respuesta