Para entender el presente de las Washington Mystics hay que conocer el pasado de las Chicago Sky. Le llegada de Elena Delle Donne ha sido un punto de inflexión en la liga. Tras convertirse en la mejor jugadora del planeta en el 2015, los resultados colectivos no consiguieron que se mantuviera en Illinois.
En el 2014, las Sky consiguieron llegar a las Finales pero se quedaron muy lejos de poder aproximarse al anillo. Las Phoenix Mercury con un game winner de Diana Taurasi en el tercer partido se llevaron la serie por una barrida monumental. Ahí empezó el principio del fin de la época de Delle Donne vistiendo de azul claro.
La siguiente temporada, Elena fue la MVP pero en los playoffs dieron un rendimiento mucho más bajo que el año anterior. Poco a poco la luz del proyecto se estaba apagando. En 2016 Delle Donne sufrió una lesión, casualmente contra las capitalinas, y no pudo jugar en los playoffs. Ese fue el momento exacto en el que salió traspasada a las Mystics habiendo asegurado que no renovaría su contrato con las Sky.
Este aterrizaje en Washington fue un momento clave y que cambió el escenario de la WNBA. Desde el 2017 son unas contenders al campeonato, y el año pasado consiguieron la proeza. Es una franquicia fundada en 1998, pero que nunca había conseguido saber lo que es ganar la Conferencia Este. Al paso de las décadas, lo consiguieron con Delle Donne en temporada consecutivas. El cambio de dinámica y filosofía del equipo cambió por completo.
Tras 15 años estancadas en las semifinales de conferencia, llegó el momento de que haya valido la pena mantener la franquicia durante tanto tiempo y superando tantos malos momentos económicos.
Emma Meesseman y Natasha Cloud, entre otras jugadoras, fueron fundamentales para respaldar a la estrella que volvió a brillar siendo la MVP de 2019. La belga fue la MVP de las Finales y la guard fue parte de los mejores quintetos defensivos, siendo parte fundamental de la columna vertebral de las Mystics.
Las de la capital se convirtieron en un gran proyecto deportivo, y como no sería diferente empezaron a convertirse en el equipo de moda. No solo han ganado el anillo, sino que han tenido mucha repercusión apoyando las causas sociales que siempre ha respaldado la WNBA.
Natasha se ha convertido en la principal voz del deporte en la lucha contra las injusticias en los Estados Unidos. No posee la plataforma de una estrella mediática de la NBA o NFL, pero dentro de su alcance ha tenido una gran demostración de liderazgo durante estas semanas. Además de recibir el apoyo de gran parte de la liga, como reflejó en su carta en The Players Tribune:
«¿Cuando veo a Elena Delle Donne publicando en su historia de IG el otro día? No tienes idea de lo que eso hace a mi espíritu, o lo que eso significa para mí. Vi la publicación de Elena, y estaba como … Ahhh, SABÍA que mi compañero de equipo me respaldaría. Lo sabía. Y eso se sintió tan bien. Esa es la MVP de nuestra liga, una de las jugadoras de baloncesto blancas más famosas del mundo, y ahora todos están viendo cuán real es. Cómo no dudó: entró allí . Y fue como, incluso esa sola publicación por sí sola, me quitó un poco del peso de los hombros. Me hizo sentir un poco menos impotente en este mundo«.
El apoyo en las Mystics no es solo dentro de la cancha, y se han convertido en una tendencia en el mundo del deporte. Tanto que Delle Donne tendrá su propia zapatilla con Nike y Cloud ha sido la primera atleta femenina que firma con Converse. Una muestra del gran impacto mediático que están teniendo ambas y puede que sea solo el comienzo. En estas semanas Natasha ha estado muy activa en la gran mayoría de medios, mientras que Elena durante la cuarentena ha comenzado a tener más presencia en Internet por su canal de YouTube. Una buena forma de encontrar maneras alternas al baloncesto de que hablen de ella y seguir aumentando la fama que merece una dos veces MVP de la liga.
Además de que este proyecto aún tiene mucha mecha ates de terminar de explotar al máximo. Aún quedan varias temporadas en la que Elena podrá ser candidata al MVP si le respetan las lesiones, siendo la principal referencia de un equipo que si la acompaña será contender al campeonato año tras año.
La incorporación de Tina Charles puede ser el factor determinante para conseguir que Washington siga en la élite. Es una jugadora que durante toda su carrera ha sido determinante en la temporada regular, pero que tiene mucha sed de conseguir triunfar en los playoffs al mismo nivel.
En Charles no solo viene una MVP de la liga, sino una de las mejores jugadoras que no tienen anillo en la última década. Un refuerzo que tiene muchos intangibles en cuando a calidad deportiva y ansia competitiva. Probablemente en las Mystics no hubieran encontrado un refuerzo mejor. «Habiendo entrenado a Tina en Connecticut, sé qué gran impacto puede tener en el juego todas las noches. Su habilidad para anotar dentro y fuera de la pintura hará que nuestra ofensiva sea aún más peligrosa que en el pasado», dijo el coach, Mike Thibault, dando a entender que ha sido un movimiento más haya de la defensa que se hizo notar en la zona.
En la temporada pasada Liz Cambage les puso en apuros en la pintura, por lo que querer ir a por un segundo campeonato seguido requería tomar precauciones para evitar un posible susto en la defensa interior. Tina cumple a la perfección los requisitos necesarios para mantener a Delle Donne aumentado su leyenda año a año.
Ahora mismo las Mystics se encuentran en la cima, pero eso no significa que no puedan seguir escalando a una cota más alta en la montaña de al lado. Todavía pueden dar más de ellas en lo deportivo, y con ello conseguir aumentar su repercusión para seguir rompiendo fronteras como han conseguido hasta ahora.
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