Mientras se vivía la primera eliminatoria de la Semifinal entre Las Vegas Aces y Connecticut Sun en la tarde del domingo, hora española, saltó una noticia que hizo poner en segundo plano el partido en juego.

El otro encuentro marcado para ese día entre Seattle Storm y Minnesota Lynx quedó aplazado debido a los resultados de unos test del coronavirus realizados a los equipos. En concreto fueron las de Seattle en donde encontraron problemas con unos diagnósticos que fueron no concluyentes al existir la posibilidad de falso positivo.

 

Con esto saltaron las alarmas, ya que los familiares de las jugadoras que seguían compitiendo habían ingresado a la burbuja y se pensaba que por ahí podría haber llegado el contagio en el caso de terminar siendo un positivo.

También se comentó que algunos alumnos de la IMG Academy ya estaban utilizando las instalaciones y que puede que hayan compartido algunas con las jugadoras, pero no ha salido información oficial al respecto y puede ser simplemente un rumor. El problema ha sido la falta de comunicación de la WNBA y los periodistas, ya que Mechelle Voeple de ESPN publicó por Twitter que querría hablar con la comisionada Cathy Engelbert y no podía.

Tras esto, se reprogramó el partido para la madrugada del martes al miércoles 23, pero eso no significaba que se jugara. Hubo un mal entendido con un correo que la liga envió a la prensa con esta nueva fecha para el primer partido entre Seattle y Minnesota.

Aunque la liga haya sido muy poco transparente, se conoció posteriormente por otros periodistas que han sido dos jugadoras de las Storm que han tenido resultados dudosos de los tests.

Además, estas jugadoras no salían en la lista de bajas para el partido. Esto significa que en el caso de que los resultados finalmente fueran negativos en los diferentes tests que han pasado esas últimas 48 horas podrían jugar. Y fue lo que pasó con una de ellas que superó las pruebas correspondientes.

«Después de una consulta exhaustiva con especialistas en salud después de las pruebas adicionales de las jugadoras y el personal de Seattle, así como la implementación del rastreo de contactos, nos sentimos seguros de seguir adelante con Storm y Lynx«, dijo la comisionada Engelbert. Pero todavía había una jugadora de las Storm esperando a que le den el resultado.

 

Después de seguir esperando la tarde del martes, cuando llegó el comienzo del partido entre Las Vegas y Connecticut salió la noticia de que todas las jugadoras de Seattle estaban disponibles para jugar. Por lo que todo finalmente queda en una mala anécdota y en un susto que finalmente quedó en nada.

Tras unos días de tensión, finalmente el show puede continuar y los playoffs seguirán adelante con normalidad. La única diferencia con lo preestablecido es que la serie de las Storm y las Lynx llevará un poco de retraso en comparación con la otra.

 

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Por Manu Fresno

La magia ocurre sobre el parqué, solo soy encargado de narrarla.

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